El Parlament desobedece al TC y aprueba la vía unilateral para la desconexión de Cataluña

Asumiendo que su petición va en contra de la interlocutoria dictada por el Tribunal Constitucional, pero haciendo prevalecer la «soberanía» del Parlamento catalán, los grupos de Junts pel Sí y la CUP han solicitado formalmente que la Cámara someta a votación las conclusiones de la comisión del Proceso Constituyente.

Junts pel Sí y la CUP, en medio de una gran bronca, han impuesto su mayoría para modificar el orden del día, con lo que el pleno ha votado finalmente las citadas conclusiones, en lo que ha será el primer desacato explícito de la Cámara a una orden del TC, algo que puede tener graves consecuencias legales para los grupos o los diputados que la secunden.

Las conclusiones, que consagran la vía «unilateral» para romper con España han sido aprobadas con los 62 votos de JpS y los diez de la CUP.

Han votado en contra los once parlamentarios de Catalunya Sí que es Pot. El PSC, que ha permanecido en el hemiciclo, no ha votado, mientras que los diputados de Ciudadanos y del PP se han ausentado.

Tras la solicitud formal, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, ha recordado a los solicitantes si son conscientes de la existencia de la interlocutoria del TC del 19 de julio -en una advertencia solicitada por los servicios jurídicos-. La citada interlocutoria avisa claramente a la Mesa de la ilegalidad de tramitar unas conclusiones que son una continuidad del contenido de la suspendida «declaración de ruptura» del 9-N.

Antes de procederse a la votación, los grupos contrarios a su tramitación -C's, PSC, Sí que es Pot y PP- han apuntado la gravedad del paso que se iba dar, reclamando una reunión de la Mesa del Parlament así como un dictamen de los letrados de la Cámara. También se ha solicitado la lectura de la interlocutoria del TC.

Para Inés Arrimadas (C's), con esta acción los diputados soberanistas «se pasan la ley por el arco del triunfo», mientras que Xavier García Albiol (PP) ha señalado que la votación supone un «atentado al estado de derecho».

Antes de votarse, y durante la sesión de control al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont ha asegurado que el Parlament está «perfectamente legitimado» para impulsar leyes y ha avanzado que votará «con mucho gusto» a favor de las conclusiones de la comisión de estudio del proceso constituyente.

Tanto el vicepresidente del Parlament, José María Espejo-Saavedra (Ciudadanos), como los secretarios David Pérez (PSC) y Joan Josep Nuet (SíQueEsPot), han reclamado como miembros de la Mesa que se reúna el organismo para decidir sobre la alteración del orden del día que han pedido en el pleno Junts pel Sí y CUP, para incluir las conclusiones de la comisión del proceso constituyente.

«El pleno es soberano, no es responsabilidad ni de Mesa ni de la Presidencia, es responsabilidad del pleno», ha señalado Forcadell en medio de la bronca entre diputados.