Acoso al alcalde de Mataró para que ceda locales donde poder votar en el referéndum

El socialista David Bote asegura que se mantiene «firme en sus convicciones» y que cumplirá la ley «porque es la garantía de la democracia»

ABC.ES / AGENCIAS

Unas 300 personas se concentraron ayer jueves frente a la sede del Ayuntamiento de Mataró (Barcelona) para pedir al alcalde, el socialista David Bote, que facilite la celebración del referéndum en el municipio. «Queremos votar, queremos votar», proclamaron las personas reunidas frente al edificio consistorial. El PSC ha calificado de «injusta y reprobable» la campaña de desprestigio que se ha iniciado contra el partido y condena el acoso al que están siendo sometidos.

Pero pese a las presiones, Bote se mantiene firme en su decisión. En una entrevista esta mañana en «Herrera en COPE», el alcalde señala que uno tiene que mantenerse «firme en sus convicciones» y que cumplirá la ley «porque es la garantía de la democracia».

El socialista, que gobierna en coalición con el PDeCAT, ha reconocido que no ha contestado a la carta que este jueves enviaba la Generalitat a los alcaldes catalanes para avisarles de que debían ceder para el referéndum los locales utilizados habitualmente para votar.

Bote no es una excepción. Casi todos los alcaldes del PSC en Cataluña ya han dicho que actuarán con prudencia ante la carta de la Generalitat, y que se basarán en las indicaciones que den los secretarios e interventores electorales. Entre ellos, están los alcaldes de Lérida y Gerona. Àngel Ros ha enviado al servicio jurídico del Ayuntamiento de Lérida la carta que ha recibido y ha asegurado que el consistorio actuará siguiendo la legalidad . «Siempre he dicho que el Ayuntamiento de Lleida se ajustará a la legalidad vigente y cumplirá la legislación» ha insistido el alcalde y presidente del PSC. De hecho, se muestra convencido de que la cifra de ayuntamientos presididos por el PSC que participen en el referéndum será «la mínima expresión», y ha asegurado que la voluntad del partido es no sancionar a estos ediles, aunque, si incumplen la ley, tendrá consecuencias.

Josep F. Ballesteros, el alcalde socialista de Tarragona, ya avanzó hace un mes también que no apoyaría tampoco el 1-O «si no cumplía la legalidad».

Amenazante carta

Puigdemont y Junqueras enviaron ayer una amenazante carta a los regidores de los municipios para avisarles de que debían ceder locales para el referéndum del 1-O. El Govern dio 48 horas de plazo para responder a la misiva.

El pleno del Tribunal Constitucional suspendió anoche de forma cautelar esa ley al admitir a trámite los cuatro recursos presentados por el Gobierno contra las resoluciones adoptadas. El TC, a instancias del Ejecutivo, ha decidido notificar esta decisión a todos los miembros del Govern y a más de 60 altos cargos de la Generalitat; a la Mesa del Parlament; a los responsables de los Mossos y también a todos los alcaldes. En una decisión adoptada por unanimidad, les recuerda a todos ellos la obligación de obedecer a la prohibición y se les apercibe de que, en caso de no hacerlo, se enfrentan a «eventuales responsabilidades, incluida la penal».

La mayoría de alcaldes que sí han ofrecido espacios para hacer la consulta pertenecen al PDeCAT, ERC y CUP y han firmado una copia del decreto para mostrar su respaldo a las intenciones de la Generalitat. Además de las alcaldesas de Vic (Barcelona) y de Girona, Anna Erra y Marta Madrenas respectivamente, otros alcaldes que han firmado simbólicamente este decreto son el de Valls (Tarragona); Albert Batet (PDeCAT), también diputado de JxSí en el Parlament; el de Sallent (Barcelona), David Saldoni, y el de Igualada (Barcelona), Marc Solsona, miembros de la dirección del PDeCAT.

También lo han hecho la alcaldesa de Vilanova de l'Aguda (Lleida), Montserrat Fornells (ERC); el de Prats de Lluçanès (Barcelona), Isaac Peraire (ERC); el de Sabadell (Barcelona), Maties Serracant (Crida per Sabadell, que une a Entesa per Sabadell y la CUP), y la de Berga (Barcelona), Montse Venturós (CUP).

Muchos, incluso, han usado las redes sociales para mostrar su adhesión. Es el caso del alcalde del PDecat de la Seu d'Urgell, Albert Batalla, que ha colgado en su cuenta de Facebook la foto en la que firma el decreto, igual que han hecho el de Cervera, Ramon Royes (PdeCAT), el de Solsona, David Rodríguez (ERC) o los de poblaciones más pequeñas como Montgai, Jaume Gilabert (ERC) o Sant Esteve de la Sarga, Jordi Navarra, también republicano.

El alcalde de Rialp Gerard Sabarich (PdeCAT) ha elegido Twitter para comunicar su apoyo al referéndum, el de Mollerussa, Marc Solsona (PdeCAT), ha elegido Instagram y otros primeros ediles han optado por comunicados, como la alcaldesa de Tàrrega, Rosa Maria Perelló (PdeCAT) o alcalde de Les Borges Blanques, Enric Mir (PdeCAT).

La duda de Barcelona

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, eludió ayer referirse a la petición del Govern y ha hecho una breve reflexión sobre el momento político en que se encuentra Cataluña, «como alcaldesa de la ciudad de Barcelona, que es también capital de Cataluña». Según fuentes municipales, Colau esperaba al auto del Tribunal Constitucional sobre el recurso del Gobierno contra la ley del referéndum y la decisión de los servicios jurídicos municipales para responder a la petición de la Generalitat. La dirigente se mostró la semana pasada abierta a favorecer las acciones independentistas siempre que no pusiera en riesgo la labor de los funcionarios.

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