La Ruta de las Estrellas recala por primera vez en Barcelona

Descubrir un menú degustación único cocinado a 8 manos por cuatro chefs con estrella Michelin con platos de la alta cocina portuguesa, holandesa y catalana sólo es posible durante 72 horas. La iniciativa, denominada Ruta de las Estrellas, arrancó en Madeira (Portugal) y recala solo hasta la noche del sábado, día 7 de mayo en el barcelonés restaurante Nectari. En esta primera edición catalana de la ruta se ofrece un menú de cinco platos más aperitivos, todos ellos con un maridaje a cargo de vinos y cavas de Codorniu al precio de 130 euros, previa reserva.

En la cocina de Nectari de Jordi Esteve, que atesora una estrella Michelin, cocinan también sus platos Ricardo Costa, líder de los nuevos chefs portugueses (1 estrella Michelin); Joachim Koeper, del restaurante Eleven de Lisboa, con otra estrella Michelin; Michael Van Der Kroft del Te Nonnetje de Amsterdam, con 2 estrellas Michelin, además del propio Esteve.

La ocasión contó con la presencia de la consellera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación de la Generalitat, Meritxell Serret, que puso de relieve el galardón que ha recibido este año Cataluña como Región Europea de la Gastronomía 2016, una distinción que destaca las diferentes culturas alimentarias europeas. También acudió a la cita Gabriela Rivieccio, directora de Promoción de Barcelona Turismo; no en vano, la capital catalana se ha convertido en destino turístico gastronómico.

La Ruta de las Estrellas se celebra desde hace cinco años en Portugal y es su primera edición en Cataluña como un encuentro de chefs con estrella Michelin. Madeira, Oporto y Lisboa son algunas de las ciudades del periplo gastronómico. En cada destino, un chef recibe al menos a dos cocineros más con estrella Michelin para cocinar juntos un ágape único. Uno de los participantes catalanes fieles a esta iniciativa es Jordi Esteve, que ha decidido celebrarla por primera vez fuera de Portugar en su restaurante Nectari de Barcelona, con el apoyo de marcas como Codorniu y Guzmán.

Se trata de una oportunidad única de descubrir la alta cocina portuguesa, holandesa y catalana sin moverse de Barcelona. Tras unos aperitivos de Nectari a base de brandada de bacalao en tubitos y una mouse de setas, el chef Koerper ofrece un salmón de Alaska marinado con melón, ensalada y almendras ofrecido con tres texturas, acompañado de Viña Pomal Rosado. Sigue un carabinero con bacalao, alcachofa y aceite de chorizo, a cargo de Van Der Kroft y regado con un Ánima de Raimat Blanc, vino elaborado con chardonnay, xarel.lo y albariño, el único que se precia de ser capaz de maridar con la alcachofa. Una melosa merluza asada con pulpo y salsa de salicornia cocinada por Ricardo Costa y regada con Codorniu RMC Blanc de Noirs, a base de pinot noir, logra elevar el buen producto a la categoría de manjar gracias al cava mutado en gran vino. El cuarto plato lo cocina Jordi Esteve, que ofrece vaca vieja con bravas latinas y salsa huancaína, plato maridado con Viña Pomal 106 barricas.

El postre, también elaborado por Jordi Esteve, es un trampantojo de hamburguesa con sus fritas, ketchup y mostaza. Sobre una base de Brownie se coloca un huevo de sorbete de naranja al que se le añade fresa y albaricoque en vez de Ketchup y mostaza. Los congregados brindaron por la memoria de la recientemente fallecida Mey Hofmann, cocinera de alta repostería que ha dejado el legado de una escuela por la que han recalado los mejores chef del momento, incluido Esteve.