El primer Marqués de Comillas, borrado de Barcelona por el gobierno de Colau

El domingo retirarán su estatua, con fiesta de «despedida» incluida, por considerarlo un «negrero» y la medida ha despertado varias críticas

Plaza de Antonio López, en Barcelona INÉS BAUCELLS

A.CABEZA

El anuncio por parte del gobierno de Ada Colau de la retirada de la estatua de Antonio López, que fue un importante comerciante del siglo XIX y el primer Marqués de Comillas, de la vía pública de Barcelona está provocando las críticas de varios colectivos . El considera prevé hacerlo efectivo este domingo con una fiesta de Els Comediants para "despedirla".

El Ayuntamiento lleva días anunciando, incluso con anuncios en la radio, que este domingo retirará el monumento , ubicado en el tramo más bajo de la Via Laietana, y que celebrará una fiesta de "despedida". El consistorio ha estado destacando que López se lucró con el tráfico de esclavos incluso cuando esto acabó prohibido y que, por este motivo, su homenaje público no encaja con la Barcelona actual.

La Asociación Catalana de Capitanes de la Marina Mercante (ACCMM) es una de las entidades que lamenta el paso que dará el Ayuntamiento y negó ayer en un comunicado que López fuera un "negrero" , com el Ayuntamiento quiera vender. La ACCMM exige que la estatua de López, así como el nombre de la plaza, se mantenga.

La entidad ha relatado que uno de sus asociados ha intentado durante meses que el Ayuntamiento le permitiera mirar el expediente que, por ley, se debe elaborar para tomar la decisión de retirar un monumento. "No ha habido manera. El Ayuntamiento no tiene ningún informe que demuestre la aseveración de que Antonio López era un 'negrero', ya que la falsedad procede exclusivamente de un panfleto del cuñado de López dedicado, sin ninguna prueba, a denigrar su memoria, desesperado por el reparto de la herencia que había decidido su padre", se asegura en la nota.

Según la ACCMM, Antonio López fue "un hombre de origen humilde que con esfuerzo, inteligencia y tesón llegó a ser el mayor empresario de la España del último tercio del siglo XIX".

Críticas desde desde Cantabria

Ésta no ha sido la única crítica recibida por la controvertida inicativa. El grupo del PP en el Parlamento cántabro anunció ayer que va a pedir a la Cámara que inste al Ayuntamiento de Barcelona a mantener la estatua del Marqués .

El diputado popular Íñigo Fernández informó ayer de la presentación de una proposición no de ley para que los grupos en la Cámara cántabra (PP, PRC, PSOE, Podemos y Mixto) trasladen su rechazo a esa decisión del Ayuntamiento de Barcelona, que opina que "ha causado entre los cántabros malestar e indignación debido a los vínculos de Antonio López, el Marqués de Santillana", con la región.

Fernández recuerda que las decisiones sobre la trama urbana de Barcelona corresponden "lógicamente" al ayuntamiento, por lo que ha indicado que su partido pide que el Parlamento apoye la iniciativa de instar a ese Consistorio a que "reconsidere" la postura de retirar esa escultura que se encuentra en la Via Laietana de la Ciudad Condal. "Que tengan un respeto hacia el pasado de aquella ciudad, de esta región y de todo nuestro país", ha pedido Fernández.

Por si esto fuera poco, la alcaldesa de Comillas (Cantabria), Teresa Noceda, se ha dirigido por carta a la alcaldesa para frenar la retairada, algo que su consistorio considera un "despropósito". Noceda reconoce la "leyenda negra" del marqués relacionada con el tráfico de personas, aunque puntualiza que "no cometió ninguna ilegalidad" porque a finales del siglo XIX era una actividad permitida. Además recuerda que fue un personaje "clave" en la historia de Barcelona y de España.

Además, la alcaldesa resalta el apoyo del marqués de Comillas al "florecimiento de las artes y la industria de Barcelona y Cataluña, a través de sus empresas industriales comerciales y financieras con presencia internacional". Y subraya, entre otros aspectos, su contribución al "embellecimiento" de la ciudad y a su desarrollo cultural, junto con su yerno Eusebio Güell, el conde de Güell en el inicio y desarrollo del modernismo.

Por todo ello, Teresa Noceda concluye que sería un " contrasentido" retirar su monumento urbano y, aunque admite que su faceta empresarial "pudo tener algunos aspectos oscuros", considera que "no es suficiente para denostar toda la labor cultural y social que realizó".

La plaza a su nombre, posible futura retirada

La estatua fue inaugurada en 1884 y ahora, tras su retirada, se trasladará al Centro de Colecciones del Museu d'Història de Barcelona (Muhba). Según los planes municipales, la marcha de la escultura se acompañará de un espectáculo ideado y dirigido por Joan Font, Piti Español, Toni Español y Sergi Galera, y también talleres infantiles y música, en una fiesta que obligará a cortar el tráfico en Via Laietana entre las 11.15 y las 13.30 horas.

Diversas entidades e iniciativas ciudadanas llevaban tiempo reclamando la retirada del nombre. De hecho, paralelamente a la retirada de la escultura, el Ayuntamiento de Barcelona ha abierto un proceso participativo para rebautizar la plaza que hasta el domingo alberga la estatua, que lleva su mismo nombre.

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