El Museo de Lérida considera «infundada» la demanda del Obispado de Barbastro por los bienes artísticos

Sostiene que el patrimonio se integró de «manera legítima» dentro de la colección del Museo Diocesano de Lérida

Un hombre observa el «Frontal de San Vicente Martir», una de las obras en disputa EFE

D. C.

El Obispado y el Consorcio del Museo de Lérida han presentado este martes alegaciones contra la demanda del Obispado de Barbastro-Monzón que reclama 111 bienes artísticos de las parroquias de la Franja aragonesa y que, hasta el 1995, estaban adscritas a la Diócesis de Lérida.

Según el museo ilerdense, se trata de «una reclamación infundada» ya que «este patrimonio artístico se integró de manera legítima dentro de la colección del Museo Diocesano de Lleida». «Las adquisiciones de estos bienes constan acreditadas en documentos conservados en los archivos diocesanos», ha apuntado el director del museo, Josep Giralt.

Así, mientras que el Obispado de Barbastro-Monzón argumenta que los bienes se incorporaron en el Museo Diocesano de Lérida en concepto de depósito, Giralt sostiene que sólo 27 de estas piezas están en depósito y, por más que se reconozca la propiedad de las parroquias de las que provenían, no se pueden devolver porque la Ley de Patrimonio Cultural Catalán no permite disgregar un conjunto de bienes artísticos protegidos, «como es nuestro caso».

El museo también señala que la mayoría de bienes se integraron al fondo del Museo Diocesano entre 1895 y 1936, lo que, asegura, «determinaría su adquisición por prescripción».

«Cualquier decisión de un tribunal civil que ordenara la devolución de las obras invadiría las competencias en materia de protección de patrimonio cultural de la Generalitat», ha añadido Giralt. En este sentido, el director del museo ha recordado que existen dos sentencias del 2010 emitidas por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), en las que nombran al Consorcio como proveedor y encargado de la unidad y protección de la colección. «Desde el Consorcio no defendemos ser propietarios de las obras, sino proveedores», ha zanjado Giralt.

La demanda del juzgado de Barbastro llegó al Museo de Lérida el pasado 27 de febrero y no fue hasta la semana pasada, tras una reunión mantenida con el Consorcio, cuando se decidió presentar, igual que el Obispado de Lleida, las alegaciones pertinentes.

Por su parte, el obispo de Léida, Salvador Giménez, ha manifestado que desde el Obispado han hecho llegar hasta los juzgados de Barbastro una serie de alegaciones referentes a una parte histórica, documental y explicativa de los hechos. Entre ellas, se recuerda que el papa León XIII favoreció hasta finales del siglo XIX la creación de «museos en todas las diócesis con la finalidad de proteger y conservar el patrimonio histórico de la iglesia» y poner freno a las ventas no autorizadas de bienes eclesiásticos.

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