Al menos trece muertos y decenas de heridos en un atropello masivo

Una furgoneta ha embestido en la tarde de este jueves a una multitud de personas en Las Ramblas de Barcelona en un acto reivindicado por Daesh a través de su agencia de noticias y que de momento se ha saldado con dos detenidos, aunque el responsable del atropello sigue huido. Uno de ellos es melillense y el otro es marroquí, según ha confirmado el conseller de Interior de la Generalitat. Los hechos han sucedido por encima de la calle Hospital, cuando un vehículo de color blanco fue conducido a gran velocidad sobre los peatones, turistas la mayoría de ellos. Según ha informado Carles Puigdemont en un acto institucional, de momento hay trece muertos, ochenta heridos y dos detenidos. El conductor de la furgoneta, según testigos presenciales, habría embestido a los viandantes entrado por la parte superior de las Ramblas y se habría desplazado a gran velocidad haciendo eses y dando volantazos a través de la multitud. «Estaba comprando tabaco en un estanco y he oído un ruido tremendo. Al salir, he visto a muchas personas en La Rambla, en el suelo, sangrando. Un kiosco estaba parcialmente destrozado. No sabía qué hacer y he salido corriendo a través del Raval. Llevo una hora corriendo», ha contado Osman, un joven marroquí de veinte años que se encontraba con unos amigos cuando ha ocurrido el ataque. La policía ha encontrado la furgoneta con la que se ha perpetrado el atentado abandonada junto a la parada de metro de Liceo. El mayor de los Mossos d'Esquadra ha afirmado que, si bien el autor material todavía no ha podido ser detenido -y no llevaba armas visibles-, no se prevé que pueda haber otro ataque terrorista en Cataluña de forma inminente. De los 80 heridos que ha causado el atentado, 15 han sido pronosticados en estado grave, 23 menos graves y 42 leves y están repartidos en una quincena de hospitales y centros médicos. Los Mossos han vinculado el atentado con la explosión ocurrida anoche en una casa de Alcanar (Tarragona), en la que una persona resultó muerta cuando, al parecer, manipulaba bombonas de butano. Uno de los dos detenidos tras el atropello ha sido arrestado precisamente en Alcanar. Dos horas después del incidente en Las Ramblas, dos Mossos d'Esquadra han sido embestidos por un vehículo en un control policial en la Diagonal. El conductor del coche ha sido localizado posteriormente a tres kilómetros de donde los agentes le han intentado detener a tiros. Los Mossos han activado a los artificieros del TEDAX para inspeccionar el vehículo, que está bajo control policial, aunque los Mossos no lo vinculan de momento con el atentado.

El presidente del Gobierno Mariano Rajoy, que ha viajado esta noche a Barcelona, ha señalado que los terroristas «nunca derrotarán a un pueblo unido que ama la libertad frente a la barbarie. Toda España está con las víctimas y familias». La Casa Real, en un mensaje muy contundente, ha señalado que los asesinos no nos van a aterrorizar: «Toda España es Barcelona». Carles Puigdemont, que ha decretado tres días de luto oficial en toda Cataluña, ha advertido por su parte que «la democracia doblegará al terrorismo y la barbarie» y que la región «ha sido, es y será tierra de paz, bienvenida y acogida». Colau, muy emocionada en su comparecencia, ha dicho tajante que «los cobardes han intentado sembrar el terror no lo conseguirán». Las reacciones en todo el mundo no se han hecho esperar. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump ha ofrecido su ayuda a las autoridades de ese país europeo en la investigación, al tiempo que pidió a los españoles ser «duros y fuertes». «¡Os queremos!», ha escrito en su cuenta de Twitter. Su predecesor, Barack Obama, ha enviado «un abrazo» a los barceloneses tras el dolor del atentado. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha denuncadio el «nuevo y horrendo ataque contra nuestras sociedades libres» y ha reafirmado que su país proseguirá «con absoluta determinación» la lucha contra el terrorismo «al lado de España». La primera ministra británica, Theresa May también ha trasladado su apoyo al Gobierno español en su lucha contra el terrorismo. Los mensajes de duelo han sido multitudinarios en las redes sociales y la Torre Eiffel de París se apagará esta noche como señal de duelo.

Unidad nacional contra el terror

España no estaba exenta de la amenaza del terror yihadista. El atentado en Barcelona de hoy ha sido la trágica demostración de que no es posible garantizar la seguridad absoluta en una sociedad democrática. Los terroristas aprovechan las mismas libertades y derechos de sus víctimas. Viven entre nosotros de manera desapercibida hasta que se retratan como terroristas en potencia. Aun así, es oportuno recordar el alto grado de eficacia que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado acreditan en la lucha contra las redes del terrorismo integrista del Daesh y de Al Qaida. Quien busque contextos políticos para explicar este acto salvaje o cuestione el rigor de la lucha antiterrorista del Estado, estará rompiendo la unidad nacional que se precisa para negar al terrorismo su principal objetivo, que es el desistimiento de las democracias y de las sociedades libres. La respuesta diligente de los poderes públicos y de los ciudadanos demostrada en este triste día debe ser correspondida por un consenso entre los partidos políticos, la mayoría de los cuales -PP, PSOE y Ciudadanos- suscribieron un Pacto de Estado contra el terrorismo yihadista que ahora tiene que funcionar como un polo de unidad política. Los que no están, como Podemos, tendrán que explicar su ausencia.