Visibilizando las dolencias intestinales

Un cinéfilo calendario, una marcha y una carrera solidarias han sido las primeras actividades con las que la Asociación de Enfermos de Crohn y Colitis Ulcerosa de Zamora (ACCU) ha implicado a toda la sociedad zamorana en su labor de concienciación sobre la enfermedad inflamatoria intestinal, una patología por la que cada año son tratados más de medio millar de zamoranos y 150.000 personas en toda España.

La asociación, creada hace dos años para servir de apoyo a los afectados, visibilizar una enfermedad que todavía se considera tabú y reclamar una atención adecuada a los pacientes de Crohn y colitis ulcerosa, ha recibido un nuevo impulso en los últimos seis meses con la llegada de Judith Isidro a la presidencia.

Lo primero fue implicar a los socios y sus familiares para que caracterizaran escenas de grandes películas como Grease, Pretty Woman, Thelma y Louise y con esas imágenes editar un original almanaque solidario de 2017 del que en poco tiempo se agotaron todos los ejemplares.

Después la labor se centró en concienciar a algunos de los profesionales que trabajan de forma directa con los afectados por la enfermedad inflamatoria intestinal, y para ello se promovieron unas jornadas específicas de información y sensibilización a los alumnos de auxiliar de enfermería. La asociación también quiso divulgar sus fines fuera de la capital zamorana y organizó una presentación pública en Toro.

Este mes ACCU Zamora ha dado un paso más con la organización de una carrera y una marcha solidaria en la que rebasaron todas las expectativas con más de 550 inscritos en esta primera edición.

«La acogida ha sido muy buena para ser una ciudad del tamaño de Zamora y tratarse de enfermedades que no se conocen», explica Judith Isidro.

Desconocimiento

El desconocimiento de estas patologías viene motivado en parte porque en muchos casos son enfermedades que quienes las desarrollan lo esconden por vergüenza. También influye el hecho de que sean complicadas de diagnosticar, ya que puede llevar entre uno y cinco años su detección precisa, debido a que los síntomas y los efectos secundarios son múltiples y no en todos los casos iguales, además de que son enfermedades que se manifiestan mediante brotes que se alternan con épocas de remisión. Tanto el Crohn como la colitis ulcerosa están asociadas a los países desarrollados, a factores genéticos y medioambientales e influye en ellas la alimentación. Se trata además de enfermedades que cada vez tienen una mayor incidencia, especialmente entre la población más joven, y prueba de ello es que una cuarta parte de los pacientes son niños o jóvenes menores de veinte años y el 50 por ciento está en la franja de edad de entre los 20 y los 39 años. La colitis ulcerosa afecta mayormente al intestino grueso y se manifiesta principalmente mediante úlceras que provocan sangrado, mientras que la enfermedad de Crohn puede afectar a todo el tubo digestivo y no siempre provoca sangrado, aunque ambas patologías comparten aspectos que lleva a englobarlas para sumar fuerzas en su tratamiento y visibilización.

Las dos enfermedades figuran además dentro del paraguas general de las dolencias intestinales y, por este motivo, coincidiendo con la celebración el pasado 19 de mayo del Día Mundial de las Enfermedades Intestinales, ACCU Zamora promovió la iluminación de color morado esa noche de la iglesia románica de Santiago del Burgo de Zamora, y al día siguiente de la fachada del Ayuntamiento de Toro. Aprovechando esa conmemoración, la asociación reclamó más medios para estos pacientes, ya que aún no dispone ni siquiera de una sede con la que espera contar en los próximos meses cedida por el Ayuntamiento de Zamora. También ve fundamental que los enfermos puedan contar a través de la asociación con apoyo psicológico y se puedan impartir en la nueva sede clases de yoga, taichí o meditación que se han demostrado útiles contra estas enfermedades y que reforzarían los talleres emocionales que ya se ofrecen.

Pero la mayor prioridad de la asociación desde el punto de vista reivindicativo y de medios de apoyo a los afectados es la creación en el sistema sanitario público de la provincia de una unidad inflamatoria intestinal. Ello permitiría contar con médicos de digestivo dedicados exclusivamente al Crohn y la colitis ulcerosa y disponer de profesionales sanitarios especializados en una unidad específica, lo que redundaría en un mejor diagnóstico y tratamiento de dos enfermedades crónicas que cada vez son más frecuentes.