El médico Jesús Sánchez es el coordinador del Centro de Salud de Candeleda
El médico Jesús Sánchez es el coordinador del Centro de Salud de Candeleda - ABC
SANIDAD

El verano lleva a Sanidad a contratar a 76 profesionales y cerrar 371 camas de hospital

Los centros de salud de las zonas turísticas se refuerzan con médicos y enfermeros

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Con la llegada del verano, muchos municipios de Castilla y León ven multiplicarse su población y, con ello, la prestación de los servicios públicos se torna, cuanto menos, complicada, ya que a una mayor presión asistencial se suman las vacaciones de los profesionales.

Es lo que ocurre con la asistencia sanitaria en localidades donde la llegada de veraneantes y turistas supone un cambio notable en los consultorios médicos, tanto por la cantidad de pacientes como por el tipo de consultas que se realizan y, sobre todo, por el aumento de las urgencias.Para hacer frente a estas situaciones, la Consejería de Sanidad ha diseñado un plan de contingencia que ha supuesto la contratación de 57 profesionales para los servicios de urgencia (19 médicos y 58 enfermeros), así como otros 19 para las consultas de atención primaria (13 médicos y seis enfermeros).

En total, 76 profesionales. Estos refuerzos se dirigen, fundamentalmente, a Ávila, Burgos, León y Soria.

Zonas con más demanda

Sólo en la provincia abulense se han contratado 25 facultativos destinados a municipios como Arenas de San Pedro, Candeleda, Cebreros, Gredos, las Navas del Marqués y Sotillo de la Adrada. En Burgos, se han previsto 13 contrataciones para reforzar zonas situadas en el norte, como Villarcayo, Medina de Pomar, Sedano o los municipios del Valle de Tobalina. En Soria son once los refuerzos previstos destinados a la zona de Pinares y, sobre todo, Covaleda. Y en Segovia, siete, para poder cubrir las necesidades de Villacastín, El Espinar o San Rafael. Otros «puntos calientes» en los que se refuerza la atención se sitúan en Boñar y Valencia de don Juan (León), el norte de Palencia, la Sierra de Francia (Salamanca) o el entorno del Lago de Sanabria, en Zamora.

Por último, en la capital vallisoletana se refuerzan los servicios de urgencias de las dos áreas de salud con siete profesionales, aunque en este caso la causa tiene más que ver con las vacaciones de los trabajadores. Pero si el incremento de la actividad en las zonas turísticas obliga a aumentar el número de sanitarios, en los hospitales la caída de la ocupación durante los meses estivales lleva a la Consejería de Sanidad a decidir el cierre de camas. Así, de junio y septiembre se eliminarán 371 plazas hospitalarias, el 5,8 por ciento del total que hay en la actualidad y que se sitúa en 6.447 camas funcionantes (7.003 instaladas), según fuentes de la Consejería. Durante el pasado año, las camas operativas se mantuvieron en una cifra similar de 6.082, con un índice medio de ocupación del 74 por ciento. Sin embargo, durante el verano baja tres puntos, si bien los mayores descensos se producen en el Complejo Asistencial de Salamanca, que desciende trece puntos; el hospital de Santiago Apóstol (Miranda de Ebro), donde la bajada es de nueve; el Clínico de Valladolid, con ocho puntos menos de ocupación, y los hospitales de Medina del Campo y Soria, con cuatro. Sacyl insiste, no obstante, en que, «a pesar de la menor ocupación hospitalaria, se van a mantener en funcionamiento nueve de cada diez camas instaladas».

Por gerencias, el mayor número de cierres se prevé León, con 104 camas, seguido por Salamanca, con 73, y Burgos, 47. En Soria y el Río Hortega de Valladolid se cerrarán 26 en cada una; en Ávila, 25; en Palencia, 17; en Medina del Campo se prevé clausurar 16 camas; en el Clínico de Valladolid, 13; en El Bierzo, diez; cinco en Segovia; cuatro en Miranda de Ebro; tres en Zamora y ninguna en Aranda.

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