Sinodal de Aguilafuente

Historia impresa

La localidad segoviana conmemora durante este fin de semana que de allí surgió el primer texto impreso en España, en 1472

Recreación de la conversación entre Juan Parix y el obispo Arias Dávila sobre la imprenta SINODAL DE AGUILAFUENTE

I. JIMENO

Con nombre propio Aguilafuente imprimió hace más de cinco siglos su nombre en la historia . Y lo hizo literalmente, uniendo indisolublemente el nombre de este pueblo segoviano al de un invento que revolucionó la cultura: la imprenta. Llegado directamente desde Alemania, el ingenio de Gutemberg tuvo en su discípulo Juan Parix y Juan Arias Dávila , entonces obispo de Segovia, los perfectos aliados para su extensión. Todo un hito que los aguiluchos se encargan año a año de recrear para que no se olvide su impronta. Aquellas Actas del Sínodo de Aguilafuente se convirtieron en el primer texto impreso en España. Una efemérides que, desde hace cinco lustros, vecinos y veraneantes se afanan en recuperar. Con todo el «rigor histórico» que es posible, echan la vista atrás. Regreso al siglo XV, en concreto, a 1472, fecha de ese cónclave eclesiástico en el que, por primera vez, los amanuenses quedaban a un lado para reproducir lo allí acontecido.

¿Y qué pasó? Para comprobarlo, basta con asistir a la recreación que este sábado y domingo , a partir de las 20.00 horas, tendrá lugar a las puertas de la iglesia de Santa María, el lugar donde se celebró el histórico acontecimiento. Ataviados con trajes de la época y muy metidos en el papel los actores permitirán asistir a esos acalorados debates en los que el tesón a favor del «diabólico» inventó también se coló en ellos.

Pero no es la única actividad en esta recreación histórica con un gran poso cultural. Desde este viernes por la tarde y hasta el domingo, Aguilafuente regresa al medievo . Danzas, pasacalles, teatros, puestos artesanos, actividades infantiles, visitas guiadas por los lugares emblemáticos y dos exposiciones (El Sinodal de Aguilafuente y la primera imprenta española y otra sobre la vida del obispo Juan Arias Dávila) componen el intenso programa de actos. Y para reponer energías ante tanta actividad, hasta ruta de tapas con los sabores de la época por los bares de la localidad y una cena medieval este sábado.

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