A once centésimas de la gloria

En Castilla-La Mancha, miles de maestros y profesores vuelven este jueves a sus colegios e institutos después de las vacaciones de verano. Para muchos no será un comienzo de curso cualquiera tras las oposiciones al Cuerpo de Maestros que se celebraron durante el estío.

Natalia irá con otra cara a su nuevo destino, Alberche del Caudillo, donde trabajará durante su año de prácticas antes del destino definitivo. A la tercera fue la vencida y Natalia logró en julio una de las 45 plazas fijas que salieron a concurso en su especialidad, Pedagogía Terapéutica. Cerca de mil compañeros se disputaron el puesto de funcionario con Natalia, quien ya estuvo a punto de lograr la machada en la anterior convocatoria: quince plazas en juego pero esta joven, especialista en Educación Especial, se quedó a las puertas en aquella ocasión.

«Somos como hermanas»

«La vida se ve de otra manera. Pero tienes sentimientos encontrados porque otros compañeros se han quedado sin plaza», reflexiona Natalia, de 29 años. Lo dice por Isabel, amiga de la infancia y vecina del mismo pueblo, Sonseca. Sin embargo, estudiaron la carrera en distintas ciudades: Isabel cursó en Toledo, y Natalia, en Cuenca, porque su especialidad no existía en la capital de Castilla-La Mancha.

«Somos como hermanas y me alegré mucho por Natalia», reconoce su amiga Isabel, que ha derramado muchas lágrimas este verano. Como otros muchos compañeros, a pesar de las horas de estudio no consiguió aprobar las oposiciones a maestro, en las que los tribunales emplean hasta cuatro decimales para evitar desempates.

En el caso de Isabel, la gloria la tuvo al alcance de la mano:aprobó los exámenes y se quedó a once centésimas de ser funcionaria de carrera, de lograr una de las 156 plazas que salieron en su especialidad, Inglés. «Te da mucha rabia. Sienta muy mal rozarlo y no tocarlo», se lamenta esta maestra, también de 29 años, como su amiga Natalia.

Eran las terceras oposiciones para Isabel, y la segunda ocasión en la que no ha logrado plaza. «Ahora te acuerdas de que podrías haber sacado un poquito más si hubieras estudiado más al principio», se resigna la joven docente.

Natalia e Isabel aprovechan la ocasión para reclamar a las autoridades educativas de la región que haya un temario común para la misma especialidad, porque «los tribunales no siguen los mismos criterios para corregir. La suerte influye mucho». Natalia lo sintió en sus propias carnes en las últimas oposiciones, aunque al final logró rematar una grandísima faena.

Dos deseos

Isabel trabaja desde 2008, cuando terminó sus estudios de Magisterio. A pesar de no lograr la gloria, por el puesto que ocupa en la bolsa de trabajo le han asignado una vacante en Los Yébenes para todo el curso escolar.

Con el paso laboral dado por Natalia, la diferencia salarial entre ella e Isabel será patente este curso. Lo notarán en sus nóminas a final de mes, porque los interinosno perciben el mismo sueldo que sus compañeros funcionarios; aquéllos no cobran los meses de verano y la paga extraordinaria es, por tanto, menor. Fue una medida del Gobierno de María Dolores de Cospedal (PP), entre otros recortes en Educación, que sigue vigente con Emiliano García-Page (PSOE).

Isabel y Natalia trabajaron en el mismo colegio, Garcilaso de la Vega, en Toledo durante el curso 2009-2010. Allí coincidieron unos meses.

Aunque eso no sucederá durante el nuevo ciclo escolar que comienza este jueves, las dos amigas esperan encontrarse en el mismo colegio más adelante, aunque con Isabel ya con plaza fija en el bolsillo.