Page reivindica el toledanismo

Emiliano García-Page ha aprovechado la sesión extraordinaria de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo, celebrada este miércoles en el Palacio de Fuensalida, sede del Gobierno de Castilla-La Mancha, para poner tarea a los miembros de esta institución que cerraba en esta jornada solemene los actos de su centenario. En su intervención, el presidente de la Junta no ocultó su orgullo y vocación por Toledo, su toledanismo y su pasión por esta ciudad, en la que nació y de la que fue alcalde durante ocho años.

En presencia de la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón; el presidente de la Diputación, Álvaro Gutiérrez y el presidente de la Real Academia, Jesús Carrobles, pidió apoyo a los académicos para la defensa del río Tajo.

«un batalla de largo alcance que necesita de todos los argumentos, historicistas, ambientalistas y patrimonialistas, para que no parezca que es una simple batalla política o electoral». «Durante mucho tiempo esta ciudad estuvo de espaldas a su realidad, a su río, y quizá por ello se toleró que se hiciera un trasvase que nos deja el río como una cloaca de aguas residuales de las comunidades vecinas, y es momento ahora de defender el río Tajo como nuestro primer patrimonio». También pidió el apoyo a los miembros de la Academia para planificar un nuevo planteamiento urbanístico de la ciudad y que, además, asesoren a la empresa francesa Puy du Fou en su proyecto de instalar un parque temático de carácter historicista en Toledo y, por último, abogó por la formalización de un protocolo «con raíces históricas» que pueda ser utilizado el Día de la Región cada 31 de mayo.

Los toledanos y su carácter

El presidente regional recordó que se han vivido momentos difíciles en la Real Academia «porque hubo un tiempo en que había gente que pensaba que esta institución era un freno al futuro y al crecimiento de la ciudad», una situación que, a su jucio, está resuelta y la ciudad está viviendo «un momento brillante» donde los toledanos, a los que defendió de quienes les critican por su carácter austero, «tienen más conciencia de lo que son y de lo que quieren ser que en muchas otras épocas de su historia». García-Page se refirió al impulso del turismo, «nuestra principal industria», que puede llevar a la capital regional a alcanzar los tres millones y medio de turistas. «Si alguien quiere hablar de futuro para Toledo, habrá otras opciones, pero la principal industria y la que más mano de obra aporta es precisamente nuestro patrimonio, nuestra historia y nuestra cultura, la razón estatutaria de esta Academia», señaló. Antes de terminar su intervención se comprometió a plantear la legislación necesaria «para que la Real Academia tenga acomodo en la legislación autonómica y esté bajo la protección de esta nueva realidad autonómica que es la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha», tal y como le reclamó Jesús Carrobles.

La alcaldesa también animó a los académicos a seguir trabajando para «conservar el espíritu toledano, estudiar su pasado y encauzar su porvenir». En estos cien años, la presencia de la Rabacht en la sociedad toledana «ha sido reiteradamente reconocida y distinguida, como hizo nuestro Ayuntamiento en 2015 con la Medalla de la Ciudad», dijo la alcaldesa, quien indicó que la celebración del centenario con el treinta aniversario de Toledo como Ciudad Patrimonio de la Humanidad, «es una feliz y estimulante coincidencia». Para Milagros Tolón, «estas tres décadas han sido muy importantes para garantizar la preservación de nuestros bienes artísticos y para revitalizar nuestra ciudad; un proceso donde las administraciones públicas, entidades privadas y ciudadanos hemos apostado muy fuerte por Toledo y por el futuro de los toledanos».

El presidente de la Diputación, Álvaro Gutiérrez, también destacó que la institución ha participado activamente en perfilar «lo mejor de Toledo y de los toledanos». «Toledo no se entiende en el último siglo sin la presencia y las aportaciones de la Academia, donde encontramos la inquietud y la sabiduría de quienes ponen su conocimiento al servicio de los ciudadanos», dijo.

En su intervención, Jesús Carrobles reivindicó el papel de la cultura en la región, «con una rentabilidad más que demostrada que no se deslocaliza», y más allá de reconocer la grandeza de la historia de la Academia y su pasado, y pidió «mirar al futuro en un mundo cada vez más global».

Nuevos académicos

La sesión extraordinaria celebrada sirvió también para entregar las medallas a los nuevos académicos: la profesora Beatriz Cano; el director del Conservatorio de Música de Toledo, Juan José Montero; el secretario del Ateneo Científico y Literario de Toledo, José María Hernández; el creador del blog «Toledo olvidado», Eduardo Sánchez Butragueño; el vicepresidente de la Sociedad de Amigos de la Sierra de San Vicente, Julio Sánchez Gil, y el jefe de servicio de la Aemet Fermín Fernández.