La isla recupera las cepas antiguas centenarias que estaban abandonadas
La isla recupera las cepas antiguas centenarias que estaban abandonadas - ABC

La vid regresa a Fuerteventura, cuna del vino canario con Juan de Bethencourt

Las Palmas de Gran Canaria Actualizado: Guardar
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Desde este mes de marzo ya hay vino producido en Fuerteventura. Han pasado varios cientos de años para que sea una realidad. No es una producción masiva, pero sí suficiente para que los amantes de e esta bebida puedan disfrutar de su sabor. Se llama Conatvs, y es la primera bodega de Fuerteventura. Adscrita a DOP Islas Canarias, en esta isla no se generaba un proyecto para lanzarse al mercado internacional desde hacía siglos.

La Bodega Conatvs es de Pedro Martín y se ubica en Lajares, La Oliva. La dirección técnica de la marca está en manos de Alberto González, que ha dedicado cientos de horas con pasión a la elaboración de un nuevo vino tinto que irá dirigido a un segmento de consumidores de alta gama.

El vino no es nuevo en Fuerteventura. A esta isla llegó un siglo antes de la primera plantación que hizo Fernando de Castro en 1497 en Tenerife y que John Hill en El Hierro en 1526. Dicen los cronistas que el afamado vino de Lanzarote y Fuerteventura es anterior porque fueron conquistadas casi un siglo antes por Juan de Bethencourt.

Muchos años después, llegó la producción de Monte Lentiscal, mitad del siglo XIX, en Gran Canaria. En el caso de Lanzarote, como en Fuerteventura, las erupciones volcánicas, el impacto negativo de las guerras europeas y los problemas de aguas en las islas originó que el vino de Fuerteventura fuera perdiendo cuota de mercado.

El viajero Bory de Saint-Vincent decía en 1800 que "se cosecha mucho vino en Fuerteventura" pero por problemas de aguas "su calidad es inferior al de las otras islas canarias".

Fuerteventura además está llevando a cabo, en colaboración con el Cabildo que preside Marcial Morales una gran labor de recuperación de cepas antiguas centenarias así como la recopilación de las variedades de uvas canarias más importantes, todo ello reforzado por actividades de formación dirigidas al sector vitivinícola.

La DOP Islas Canarias es un proyecto integrador que no compite con nadie, sino que mejora las posibilidades económicas y canaliza ventas para aquellos operadores que precisan un instrumento único de exportación del vino de Canarias.

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