Investigan si los neonazis que irrumpieron en un concierto en Mallorca cometieron un delito de odio

La Policía Local de Palma entregará esta semana a la Fiscalía y al Cuerpo Nacional de Policía el informe que ha elaborado sobre los incidentes provocados el pasado viernes por los integrantes de un grupo neonazi alemán en un concierto celebrado en un establecimiento de la principal zona turística del municipio, conocida como s'Arenal. Dicho grupo, conformado por unas quince personas, empezó a corear «¡extranjeros fuera!» cuando, al parecer, vio a una persona de color en el interior del local. El Ministerio Público deberá valorar ahora si esos hechos son constitutivos o no de un presunto delito de incitación al odio.

El suceso empezó en un «biergarten» de la calle del Jamón de s'Arenal. En aquel momento, estaba actuando en el interior del establecimiento la cantante Mia Julia, que recriminó al citado grupo neonazi su actitud.

Los alborotadores exhibían, además, la bandera de la Marina Imperial alemana de principios del siglo XX. Dicha enseña acabaría formando parte, posteriormente, de la simbología nazi.

Según el rotativo «Bild», algunos de los neonazis que irrumpieron en el concierto llevaban tatuajes nazis y portaban camisetas en las que podía leerse «Malle nazi kiez» («Mallorca barrio nazi»). Cabe recordar que «Malle» es el nombre coloquial con el que es denominada Mallorca por parte de personas de habla alemana.

Instantes después de que empezasen los momentos de tensión, la mayor parte del público asistente al espectáculo musical empezó a gritar «Nazis, raus! Nazis, raus!» («¡Nazis, fuera! ¡Nazis, fuera!»). Finalmente, pasados unos minutos, los alborotadores fueron desalojados del local. Al parecer, todos ellos son integrantes de los «Hammerskins» y procedían de la localidad germana de Frankfurt.

El incidente del pasado viernes no ha sido el único que ha tenido lugar este fin de semana en Mallorca vinculado a las principales zonas turísticas de la isla. Así, el pasado sábado hubo dos incidentes más, ambos en el municipio mallorquín de Calviá. Por la mañana, en la zona de Palmanova, unos veinte turistas de nacionalidad británica decidieron correr completamente desnudos por varias calles. El Ayuntamiento de Calviá sancionó a cada uno de esos turistas con una multa de 200 euros, por vulneración de la normativa municipal.

El mismo sábado, pero ya por la tarde, hubo un enfrentamiento entre turistas escoceses e ingleses en la zona de Magaluf, que obligó a la intervención de la Policía Local. La pelea se produjo en la vía pública después de que hubiera finalizado el partido de fútbol entre las selecciones de Escocia e Inglaterra.