Sociedad

Las tóxicas pulseras de mercadillo que traen de cabeza a las autoridades

Hechas con semillas altamente peligrosas para la salud, la Guardia Civil acaba de intervenir varias de ellas en Zaragoza

Imagen de las pulseras artesanales intervenidas en Zaragoza por su alta toxicidad

ABC

Son abalorios artesanales y aparentemente inofensivos. Pero esa aparencia no se corresponde con la realidad. Las puleras hechas con semillas de abrina («Abrus Precatorius») son altalmente peligrosas para la salud, por el elevado contenido tóxico de esas semillas usadas como materia prima en algunas de esas pulseras artesanales que pueden encontrarse en puestos de mercadillo.

Hace años que fueron detectadas en España y, desde entonces, las autoridades de consumo y las fuerzas de seguridad extreman la vigilancia en mercadillos en los que creen que puede producirse su venta. Como en los que estos días han salpicado el centro de Zaragoza con motivo de las Fiestas del Pilar, y en los que agentes del Seprona de la Guardia Civil han localizado -e intervenido- diez pulseras de este tipo que estaban expuestas para la venta.

Según han recordado desde el Seprona, «estas semillas contienen un alto contenido tóxico en su interior, siendo extremadamente peligroso para el organismo humano su ingesta accidental o deliberada». Su peligrosidad incluso existe por el mero hecho de llevarlas, por el contacto con la piel: «también puede ser peligroso portar estas pulseras, colgantes u otro objeto que contenga las citadas semillas, puesto que a través de la epidermis y con el paso de los días, puede introducir en el organismo pequeñas cantidades de esta toxina», indican las mismas fuentes.

Tras identificar a los responsables del puesto de venta ambulante e informarles de la toxicidad de estas semillas, las pulseras fueron intervenidas y han sido remitidas al Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) del Gobierno regional para que sus laboratorios confirmaran -y así lo han hecho- que se trata de la especie Abrus Precatorius, altamente tóxica.

En 2014 ya se dispararon las alertas por este tipo de abalarios hechos con semillas tóxicas. Las realizadas con semillas de abrina, como las intervenidas estos días en Zaragoza, son de color rojo intenso y con una mancha negra. Su toxicidad afecta al sistema nervioso y digestivo. Sus consecuencias pueden llegar a ser muy graves, incluso letales , en caso de que llegue una cantidad singificativa del tóxico al torrente sanguíneo -por ejemplo, por contacto con una herida-.

Similares, aunque de mayor tamaño, son las semillas de Ormosia coccinea. Éstas, en caso de ingestión, puede desencadenar cuadros de alucionaiones y vómitos, que también pueden llegar a ser de gravedad.

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