Una delegación de las Cortes de Aragón visita los pueblos afectados por las riadas del Ebro

Una delegación de las Cortes de Aragón visita este martes varias de las zonas afectadas sistemáticamente por las inundaciones que provocan las recurrentes riadas del Ebro. La visita se produce mientras los municipios ribereños insisten en denunciar que aún no se han realizado todas las obras prometidas tras las graves inundaciones de hace dos años.

En esta visita participarán los miembros de la mesa parlamentaria de Desarrollo Rural y Sostenibilidad de las Cortes regionales. Junto a representantes de la directiva de la Asociación de Afectados por las riadas del Ebro (Asafre), recorrerán varias localidades ribereñas y emplazamientos afectados por las últimas riadas.

Desde Asafre han indicado que este grupo de parlamentarios podrán comprobar, «de primera mano», las deficiencias que siguen arrastrándose en la zona y que atenaza a los agricultores, ganaderos y habitantes de los pueblos ribereños, que sufren pérdidas prácticamente todos los años por el desbordamiento del Ebro

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A mediados del pasado enero, una crecida anegó 1.500 hectáreas de campos de cultivo próximos al río en el tramo zaragozano del Ebro. En marzo del año pasado, otra riada inundó un millar de hectáreas. Y en el primer trimestre de 2015 sufrieron varias inundaciones consecutivas, la más grave entre los últimos días de febrero y los primeros de marzo de aquel año, que dejó pérdidas multimillonarias en producciones agropecuarias, infraestructuras urbanas, rurales y carreteras.

Asafre ha advertido que, tras aquella devastadora inundación de hace dos años, las administraciones públicas se comprometieron no solo a reparar los daños causados por las riadas sino también a fortalecer las defensas en las márgenes del río para prevenir situaciones similares a futuro.

Sin embargo, insisten en que esas obras aún no se han completado, lo que deja a estos municipios en situación de vulnerabilidad. Asafre incluso ha advertido que, si vuelven a repetirse inundaciones tan dañinas como las que se produjeron hace dos años, emprenderán acciones legales contra los responsables políticos de las administraciones que deberían acometer estas obras de reparación y seguridad hidráulica. La coordinadora de afectados ha apuntado a que, si se diera esa circunstancia, incluso actuarían por lo penal.

Asafre lleva años reivindicando dragados y limpiezas en profundidad del cauce aragonés del Ebro, porque considera que ese es el problema de raíz de la cada vez mayor recurrencia con la que se producen las inundaciones. Subrayan que el endurecimiento de la normativa medioambiental que se produjo hace años prima el conservacionismo frente a los criterios de seguridad hidráulica de los pueblos y campos ribereños. Por eso -insisten-, al dejarse de hacer limpiezas del cauce como las que se hacían tiempo atrás, el río cada vez tiene menos capacidad y necesita aumentos de caudal menos significativos para acabar desbordándose.