Pedro Sánchez, en el acto de este martes en el que ha recibido el apoyo de 200 personalidades
Pedro Sánchez, en el acto de este martes en el que ha recibido el apoyo de 200 personalidades - ÁNGEL DE ANTONIO

Sánchez se «apropia» del divorcio y rectifica diciendo que tenía 9 años

Alarma en el PSOE por los errores del líder y el estancamiento en las encuestas

Madrid Actualizado: Guardar
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Fue un «lapsus» pero ha llegado «en el peor momento», reconocen varios cuadros socialistas a ABC tras haber escuchado a Pedro Sánchez afirmar, el lunes por la noche en TVE, que la Ley del Divorcio la trajo el PSOE a España; en realidad, fue el Ejecutivo de Leopoldo Calvo-Sotelo (UCD) el que la sacó adelante un 23 de junio de 1981... un año antes de la llegada al poder de Felipe González. Ayer, en Pamplona, Sánchez intentó arreglarlo escudándose en que, entonces, él tenía solo nueve años. Y se agarró también a que el impulsor de la norma, el fallecido Francisco Fernández Ordóñez, acabo en el PSOE: «Si con eso reivindico la figura de Paco Fernández Ordóñez, que fue un gran político, que luego fue por cierto ministro de Asuntos Exteriores con Felipe González, pues perfecto», dijo el hoy secretario general del PSOE, señalando que su partido está detrás de todos los avances en derechos que ha habido en España.

Si embargo, el daño a su imagen está hecho y ayer coleaba en las conversaciones de los socialistas. No pasaría de ser anécdota si no fuera porque en el principal partido de la oposición se ha desatado la alarma tras la última «semana horribilis». Ya son demasiados «errores» concatenados, se dice, empezando por haber dejado pasar la oportunidad de aparecer en La Moncloa, antes que Albert Rivera y Pablo Iglesias, como el referente de la oposición a Mariano Rajoy. Sánchez renunció a dar rueda de prensa el miércoles pasado y luego el PSOE vio con estupor el aprovechamiento mediático que sí hicieron Rivera e Iglesias el viernes.

«Pájara» en campaña

Susana Díaz tiene la sensación de que el PSOE no sale a ganar sino a «competir» con Ciudadanos

No hay un diagnóstico común entre los barones: por ejemplo, a Susana Díaz no le gusta la sensación que está dando el PSOE de que no sale a ganar sino a «competir» con Ciudadanos; otros prefieren poner el acento en la necesidad de que tienen que terminar este tipo de «ingenuidades». Lo que les une a todos es la inquietud porque están viendo que, a 45 días de las elecciones del 20-D, no solo ninguna encuesta da ganador al PSOE sino que casi todas pronostican un hundimiento de la sigla (por debajo de los 110 diputados de Rubalcaba en 2011) e incluso el «sorpasso» de Ciudadanos.

Nadie cree en Ferraz ni en las principales federaciones que ese escenario tan negro vaya finalmente a producirse -se piensa que la dinámica de campaña acabará reforzando el bipartidismo PP-PSOE, pero es cierto que se han encendido luces rojas.

Hay quien piensa que Pedro Sánchez está pasando, como los ciclistas, una «pájara» y que se recuperará, pero no le queda demasiado tiempo. «El punto de inflexión puede ser una buena actuación en el debate cara a cara con Rajoy en televisión», señala una fuente. De momento, admite, «no es buena señal» que la audiencia de la entrevista el lunes en TVE a quien se presenta como alternativa al presidente del Gobierno fuera menor que la de éste: 2.063.000 espectadores Sánchez por 2.230.000 Rajoy el lunes anterior.

¿Desinterés? Lo cierto es que en el acto de apoyo de la cultura Sánchez, anoche, no hubo ni rastro del glamour que exhibió Zapatero en 2008 con Víctor Manuel, Ana Belén, Sabina, Pedro Almodóvar, Miguel Bosé, Concha Velasco y otros.

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