Albert Rivera ayer durante un acto en Barcelona
Albert Rivera ayer durante un acto en Barcelona - EFE
CRISIS EN MURCIA

Rivera ante su gran dilema: O mantener al PP o permitir un Gobierno que dependa de Podemos

Ciudadanos se inclina por no apoyar la moción del PSOE si no es para ir a elecciones: «Los murcianos no votaron ni de lejos que Tovar (PSOE) sea presidente»

Madrid Actualizado: Guardar
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Hasta ahora Albert Rivera había sorteado con suficiencia, aunque no sin dificultades, el estrecho camino que sus exigencias han labrado. Un discurso plagado de cortafuegos para sus adversarios que unido a un desacomplejado sentido del protagonismo ahora trasladan sobre las espaldas de Ciudadanos la responsabilidad de hacer caer o no al Gobierno de la Región de Murcia. Tras un año de bloqueo político a nivel nacional, la crisis en Murcia puede convertirse en el primer caso en que la fragmentación política desemboca en crisis e inestabilidad institucional. Y que eso suceda depende de Albert Rivera.

Ayer, el PSOE se sacudió de un plumazo la presión que Ciudadanos había tratado de trasladarle al pedir su apoyo para una moción de censura «instrumental» que derivase en una nueva convocatoria electoral.

Los de Rivera trataban de pasar a los socialistas la presión para que eligiesen entre mantener a Pedro Antonio Sánchez en el cargo o elecciones. Se aprovechaba Cs para ello del convulso momento que vive el PSOE en toda España y que tiene también su réplica en Murcia.

«La prueba de fuego»

Los dirigentes de la formación creían detectar tanto en la gestora como en parte del PSOE murciano poco entusiasmo con el hecho de una fórmula de gobierno tripartita que incorporase a Podemos y liderada por el actual líder regional, Rafael González Tovar, ex partidario de Pedro Sánchez y ahora cercano a Patxi López. Esas divisiones, que existen, no han sido suficientes para que el PSOE entrase al órdago de Ciudadanos, al menos por ahora. González Tovar acudía por la mañana al parlamento autonómico acompañado de los otros 12 diputados de su grupo para registrar una moción de censura acusando al presidente murciano de «faltar a la palabra dada, incumple lo que firma y quiebra el principio democrático de cumplir el mandato de la ley». Una moción que como dejó claro González Tovar no pretende sucederse de una convocatoria electoral como quiere Ciudadanos, sino «para conseguir un Gobierno de regeneración y que trabaje por los problemas reales de la Región para los próximos dos años». Desde la dirección nacional se reconocía ayer que apoyaban la decisión de su grupo parlamentario en Murcia.

El movimiento lleva ahora toda la presión a Ciudadanos. Desde Podemos, su secretario general en Murcia, el errejonista, Oscar Urralburu, confirmó que su partido apoyará la moción de censura y pidió a Ciudadanos que demuestre «de qué pasta está hecha». Para Urralburu esta moción es «la prueba de fuego de Albert Rivera». Podemos incrementó la presión con mensajes desde la dirección nacional, con su portavoz en el Congreso, Irene Montero, animando a Rivera a decidir si «deja de sostener al PP corrupto de Murcia». La ausencia de consenso en la oposición puede servirle al presidente de la región, Pedro Antonio Sánchez, para seguir en el cargo. Ciudadanos todavía no se atreve a decir qué hará cuando llegue el momento de la votación y el voto de sus cuatro diputados sea determinante para que Pedro Antonio Sánchez siga como presidente o para que acceda al cargo Rafael González Tovar.

Que Ciudadanos sigue teniendo como primera opción que el PP releve a Pedro Antonio Sánchez lo dejó claro el portavoz de la formación en la región, Miguel Sánchez: «Los murcianos no votaron ni de cerca que Tovar, que cosechó los peores resultados del PSOE en la Región, sea presidente», recordó. Y le advirtió que «no puede serlo por la puerta de atrás». El secretario general del partido, José Manuel Villegas, trató de ganar tiempo y no quiso aventurar qué decidirá su formación: « Nosotros seguimos en la misma postura que venimos defendiendo. Estamos dispuestos a apoyar esta moción siempre que se asuma que no es para un intercambio de poltronas sino para convocar elecciones».

«Que resuelva la Justicia»

En el PP, tanto en Madrid como en Murcia, el objetivo es «aguantar» y se limitan a pedir responsabilidad y prudencia a Rivera. El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, indicó en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que en su opinión «lo lógico» y «lo correcto» es esperar a que el tribunal determine si se le abre juicio oral a Pedro Antonio Sánchez por el caso Auditorio, momento en el que si debería dimitir según los propios estatutos del PP, o si como confían los populares se archiva la causa. «Hay que actuar con cautela, con prudencia, y dejar la precipitación y las prisas fuera del debate. Creo que lo que tenemos que hacer todos es esperar a ver cuál es la decisión del Tribunal Superior de Justicia. La presunción de inocencia y los antecedentes abonan esta teoría», dijo el portavoz, informa I. Reyero. La Mesa de la Asamblea de Murcia se reúne el lunes para corroborar que la moción presentada cumple con los requisitos formales. Según el Estatuto regional deben pasar desde entonces cinco días, con lo que el pleno no se celebraría hasta el 3 de abril.

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