Contexto Leer más tarde

El PSOE decide abstenerse y facilitar la investidura de RajoyLunes, 24 de octubre de 2016 a las 00:29:03

El PSOE decide abstenerse y facilitar la investidura de Rajoy
LA NOTICIA

El Comité Federal del PSOE permite que gobierne el PP

El Comité Federal del PSOE ha decidido hoy abstenerse en una nueva investidura de Rajoy, gesto que abre la puerta a que después de más de 300 días de gobierno en funciones, el líder del PP pueda formar un nuevo Ejecutivo una vez logre la confianza de la Cámara Baja antes del 31 de octubre. La decisión ha sido tomada por 139 votos y 96 en contra. El presidente de la gestora, Javier Fernández, ha señalado tras la reunión que trasladará al grupo parlamentario socialista que todos los diputados de su partido se abstengan. «Hay algo imperativo» en la resolución aprobada, ha dejado claro, antes de insistir en que sólo entiende la abstención como tal y que ese es el planteamiento que trasladará a los diputados. A diferencia de lo ocurrido en el tumultuoso Comité Federal del pasado 1 de octubre, que acabó con la dimisión de Pedro Sanchez, el máximo órgano del PSOE arrancó esta mañana con una hora de retraso pero con cierta normalidad. Al inicio del mismo, el líder de los socialistas murcianos, Rafael González Tovar, afín al sanchismo, impugnó el Comité porque no fue aceptada su propuesta de que los miembros de la gestora no tuvieran derecho a voto. Inmediatamente, la mayoría se movilizó para tumbar la propuesta y se votó la nueva Mesa del Comité Federal para quitar a los sanchistas la mayoría de que gozaban en ella. José Blanco ha sido elegido en esta votación presidente y es quien ha organizado la reunión de hoy. Después, se ha debatido la propuesta de abstención a través de un documento presentado por Elena Valenciano y otro a favor del «no» firmado por el parlamentario vasco Txarli Prieto. 54 personas han pedido intervenir antes de votar la decisión, la mayoría en contra de la abstención. Susana Díaz ha apelado a la «unidad» del PSOE para buscar la victoria aunque en ningún momento ha mencionado la palabra «abstención» durante su intervención en defensa de evitar unas terceras elecciones. Los presidentes de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, y de Aragón, Javier Lambán, han renunciado a hablar en la reunión pese a mostrarse también abiertamente a favor de la abstención. Los tres barones socialistas gobiernan en sus respectivas comunidades con el apoyo de Podemos.

REPERCUSIÓN

Desde un principio, muchos de los barones que hoy han apadrinado este giro histórico, principalmente Susana Diaz, Guillermo Fernández Vara o el propio presidente de la gestora, el asturiano Javier Fernández, pusieron de manifiesto que la estrategia del «no» llevaba al PSOE a un callejón sin salida. El problema en estos diez meses es que la estrategia institucional se ha cruzado con los intereses orgánicos del dimitido Pedro Sanchez, por un lado, y de los barones por otro. Sánchez intuyó que todo lo que no fuera alejarse del PP significaría su muerte política. Y por eso intentó en la anterior legislatura una investidura fallida de la mano de Ciudadanos, en la esperanza de que Podemos acabara apoyándole. Eso no ocurrió, España fue a otras elecciones el 26 de junio y el PSOE no solo no subió los 90 diputados de diciembre, hasta entonces el peor resultado de la historia, sino que bajó a 85. A partir de entonces, el divorcio de los barones con el ya exsecretario general fue más que patente. Y su anuncio de un congreso extraordinario del PSOE para blindarse en el cargo, cuyas primarias estaban previstas precisamente hoy, acabó por detonar la crisis. Sin embargo, la nítida escisión en el PSOE está lejos de cerrarse. Los siete diputados del PSC y los dos representantes de Baleares han manifestado que mantienen su «no» a Rajoy pese a lo dictado por el Comité Federal, al igual que los parlamentarios Margarita Robles, Susana Sumelzo, Odon Elorza y Rocío de Frutos. Otros cuatro diputados, incluido Pedro Sánchez, también podrían acabar votando en contra.

LA OPINIÓN DE ABC

El PSOE paga sus errores con el acierto de la abstención

El PSOE es hoy un partido al que tomar una decisión responsable y beneficiosa para España le ha provocado una fractura interna cuyas dimensiones aún no están medidas. Dependerán de cómo sepan resistir el acoso que hoy mismo ha comenzado Pablo Iglesias al acusar al PSOE de crear una «gran coalición» con el PP; y dependerá de que la organización interna socialista sea capaz de absorber y canalizar las tensiones que generará no sólo la abstención ante Rajoy, sino también la pugna por el poder dentro del partido. La renovación del PSOE ya no es una opción, es una necesidad. El PSOE ha de asumir que con su abstención no se acaba su compromiso con el país, sino que empieza de verdad y continúa con un pacto sobre los Presupuestos Generales del Estado para 2017. Los socialistas no deben regodearse en la mayoría parlamentaria que puede forjarse contra el PP, porque Rajoy siempre tendrá el mando de unas nuevas elecciones generales si su Gobierno queda encerrado en un bloqueo parlamentario liderado por el PSOE

No hacía falta tanto dolor

SALVADOR SOSTRES Por SALVADOR SOSTRES

El PSOE se ha inclinado dolorosamente hacia la abstención de Rajoy. Es un buen paso en la correcta dirección. Pero no hacía falta tanto dolor, ni tanto espectáculo. Los socialistas tienen que entender que no han de parecerse a Podemos sino dejarles en evidencia; que la derecha no es su ememigo, sino el totalitarismo y el caos. España necesita que su segundo gran partido deje de ser su principal problema para que pueda llegar a ser una de sus soluciones.