La presidenta del Parlamento balear abandona la reunión que debía destituirla

La todavía presidenta del Parlamento balear, Xelo Huertas, ha abandonado este martes la reunión extraordinaria de la Mesa de la Cámara en la que, en principio, debía decidirse su cese. Huertas ha tomado esta decisión porque uno de los integrantes de la Mesa, el diputado socialista Vicenç Thomàs, tenía en su poder un informe de los letrados del Parlamento sobre el proceso de destitución que, al parecer, no tenía la propia Huertas. En ese contexto, la todavía presidenta del hemiciclo ha alegado «indefensión». Los diputados populares Miquel Vidal y Miguel Jerez, integrantes de la Mesa, han abandonado también dicho encuentro por el mismo motivo.

Cabe recordar que la reunión de este martes había sido convocada por Huertas el pasado jueves.

En principio, en este encuentro debía darse cuenta de que hace una semana Huertas y la diputada autonómica Montserrat Seijas fueron expulsadas formalmente del Grupo Parlamentario de Podemos. Teóricamente, a continuación debería haberse debatido sobre la posibilidad de destituir a Huertas como segunda autoridad del Archipiélago, ya que el nuevo reglamento del Parlamento autonómico establece, en su artículo 39 c, que uno de los motivos para el abandono de la Mesa por parte de un diputado o una diputada es «dejar de pertenecer a su grupo parlamentario».

Escrito de Huertas

En cualquier caso, unas horas antes de la reunión de esta mañana, Huertas había presentado un escrito en el que solicitaba a la Mesa de la Cámara que no adoptase ninguna decisión sobre un posible relevo en la presidencia del hemiciclo hasta que los tribunales se pronunciasen sobre la demanda que la propia Huertas presentó el pasado 4 de enero contra Podemos a raíz de su expulsión de la formación morada.

El detonante de la actual situación de inestabilidad institucional cabe situarlo en octubre del pasado año, cuando Huertas y Seijas amagaron en un chat interno con no apoyar los Presupuestos de la Comunidad de 2017 si no se renovaba un convenio que el laboratorio científico del militante Daniel Bachiller tenía suscrito desde hacía una década con el Gobierno balear. A partir de ese momento, se les abrió a ambas diputadas un expediente por parte de la Comisión de Garantías regional, que informó del caso al órgano equivalente estatal.

El proceso disciplinario culminó recientemente con la expulsión definitiva de Huertas y de Seijas de Podemos y del Grupo Parlamentario, a pesar de que finalmente las dos votaron a favor de los Presupuestos, al igual que sus ya excompañeros de partido. Ambas diputadas han venido reiterando que su reciente expulsión obedecería únicamente al hecho de haber cuestionado diversas actuaciones de la cúpula regional y del secretario general, Alberto Jarabo, algo que éste ha negado.

Crisis institucional

La situación producida este martes en la reunión de la Mesa de la Cámara podría, por otra parte, tensar aún más las relaciones en el seno del actual tripartito balear. Cabe recordar que en junio de 2015 el PSOE, la coalición econacionalista MÉS y Podemos suscribieron un pacto que posibilitó que la socialista Francina Armengol pasase a presidir la Comunidad. Desde entonces, el tripartito había pasado por varios momentos de crisis, pero ninguno tan grave como el actual. En ese sentido, tanto el PSOE como MÉS habían apremiado a Podemos en estas últimas semanas para que resolviera lo antes posible una situación que está derivando en una crisis institucional.

Una vez que se ha interrumpido la citada reunión de la Mesa de este martes, el diputado socialista Vicenç Thomàs ha acusado a Huertas y a los dos diputados del PP que también han abandonado el encuentro de «prevaricación». Según Thomàs, que es el actual vicepresidente primero de la Cámara, al inicio de la reunión Huertas habría dicho que se inhibía de presidir la sesión debido al asunto que se iba a tratar, por lo que el propio diputado ha pasado a dirigir la reunión. Ha sido entonces cuando Thomàs ha presentado el informe jurídico que, al parecer, no había sido entregado ni a Huertas ni a los dos diputados populares.

Por su parte, uno de dichos diputados del PP, en concreto Miguel Jerez, ha lamentado la falta de «juego limpio» en dicha reunión, al mismo tiempo que ha vuelto a reiterar sus dudas acerca de si es posible una destitución automática de Huertas basándose únicamente en el artículo 39 c del reglamento de la Cámara.

Finalmente, Huertas ha advertido, a través de un comunicado, que la Mesa del Parlamento regional podría conculcar sus «derechos fundamentales» si decidiera destituirla sin tener en cuenta las medidas cautelares que la propia Huertas solicitó a la Cámara tras haber sido expulsada de Podemos y haber presentado una demanda contra la formación morada.

«El PP ha ganado una diputada»

En principio, estaba previsto que la reunión de la Mesa se reanudase a la una del mediodía, pero ante la persistencia de la ausencia de Huertas y de los dos diputados del PP, Thomàs ha decidido levantar la sesión una hora después. De momento, Huertas sigue siendo por tanto la presidenta de la Cámara autonómica.

A raíz de los hechos desarrollados a lo largo de esta mañana, la portavoz del PP en el Parlamento regional, Margalida Prohens, ha acusado al PSOE de «secuestrar» la Cámara y de haber intentado un «pucherazo» para destituir a Huertas. Además, ha negado que Thomàs hubiera ofrecido el citado documento jurídico de los letrados de la Cámara al PP cuando ha empezado la polémica sobre este punto.

Por su parte, la diputada de MÉS y representante de la coalición econacionalista en la Mesa, Joana Aina Campomar, ha dicho a los medios que sí se había producido ese ofrecimiento del citado documento a los diputados populares. En ese momento, Campomar y Prohens han polemizado sobre esta cuestión. Por otro lado, la portavoz parlamentaria de Podemos, Laura Camargo, ha ironizado ante los medios y ha afirmado que «el PP ha ganado una diputada», en referencia a Huertas. Según Camargo, la exdiputada de Podemos y los populares habrían hecho un «frente común».

En ese contexto, el PSOE, MÉS y Podemos han presentado una solicitud de convocatoria urgente de la Junta de Portavoces para intentar desbloquear la situación. La reunión de la Junta debería convocarse en un plazo máximo de cuatro días.