La Policía remite al juez las lesiones que sufrieron 40 agentes al intentar evitar el 1-O en Cataluña

A raíz de los «actos de resistencia activa» de concentrados que trataban de evitar que cumplieran la orden judicial

La Policía, frente a un colegio el 1-O ABC

EFE

La Policía Nacional ha remitido al decanato de los juzgados de Barcelona los partes de lesiones que sufrieron el 1-O un total de 40 agentes antidisturbios (UIP), a raíz de los «actos de resistencia activa» de concentrados que trataban de evitar que cumplieran la orden judicial de impedir el referéndum.

Así consta en un informe, al que ha tenido acceso Efe, en el que la Dirección General de la Policía detalla el listado de los 40 agentes de las Unidades de Intervención Policial (UIP) que resultaron heridos el 1-O en los distintos centros de votación «del ilegítimo referéndum» en Cataluña.

Según el informe, los 40 agentes resultaron lesionados el 1-O «en el cumplimiento de su deber» debido a los «actos de resistencia activa» llevados a cabo por personas que se resistieron a su intervención para cumplir con el mandato judicial de impedir el «ilegítimo referéndum».

En concreto, los agentes lesionados, que intervinieron para impedir la votación en colegios de Barcelona, L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), Sabadell (Barcelona) y Girona, presentan partes por dolencias como contusiones -facial, en brazos, en zona genital y en piernas-, hematomas, distensión del hombro, tumefacción, fracturas de dedos, esguinces, arañazos en el tabique nasal y heridas incisas en antebrazo.

La Policía remitió este informe en primer lugar al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), si bien el alto tribunal lo devolvió al considerar que no era el órgano judicial que se tenía que encargar de investigar esas lesiones.

Por este motivo, la Policía ha enviado ahora el informe con los partes facultativos de los 40 agentes antidisturbios heridos el 1-O en puntos de votación de Cataluña al decanato de los juzgados de instrucción de Barcelona, con el fin de que se reparta al juez competente.

De hecho, según recuerda el informe, el titular del juzgado de instrucción número 7 de Barcelona está llevando a cabo «toda una suerte de procedimientos penales relacionados con los hechos ocurridos en cada uno de los centros de votación», entre ellos las cargas en las que resultaron heridos unas doscientas personas.

En Barcelona, los agentes resultaron lesionados en los puntos de votación CAP Guinardó (1), CEIP Estel (2), CEIP Ramon Llull (6), Colegio Ausiàs March (1), Escola Mediterrànea (2), Escola Santa Catalina de Siena (1), Escoles Pies de Sant Antoni (4), Escuela oficial de Idiomas (1), Escuela Prosperidad (2), IES Jaume Balmes (1), IES Joan Fuster (2) y en el IES Pau Claris (1).

En L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), hubo un agente herido en el punto de votación de Camp Vilumara, mientras que en Sabadell (Barcelona) fueron seis los policías lesionados, en el Colegio Nostra Llar. Por su parte, el informe menciona a otros nueve agentes lesionados en el colegio Verd de Girona.

Un inspector, jefe del grupo II de la UIP, que resultó herido el 1-O en el Colegio Escoles Pies de Sant Antoni, explica en un escrito que consta en el informe que, tras intentar dejar libre el acceso de la entrada del edificio, recibió un fuerte golpe en la muñeca derecha y fue agarrado del brazo izquierdo, donde notó un fuerte tirón, «fruto de la enorme fuerza y violencia empleada por dos sujetos allí presentes».

En la misma línea, uno de los seis agentes lesionados en el CEIP Ramon Llull sostiene en un escrito que fueron interceptados por un grupo de entre 400 y 500 personas , que «de manera agresiva» cortaron la calle, en la intersección entre Diputación y Sardenya, por lo que bajó de la furgoneta para dar instrucciones al resto de conductores del grupo.

Según la versión de este policía, cuando se dirigía de nuevo a la furgoneta, para intentar continuar la marcha, notó como impactó en su antebrazo izquierdo un «objeto sólido», procedente de un lanzamiento de la masa de personas, por lo que, al finalizar el servicio, observó como se le había hinchado el antebrazo en la zona más próxima al codo.

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