Sánchez dialoga ayer con la presidenta del PSOE, Micaela Navarro, en la reunión del Comité Federal del PSOE
Sánchez dialoga ayer con la presidenta del PSOE, Micaela Navarro, en la reunión del Comité Federal del PSOE - Efe

La oferta a última hora de Sánchez dinamita los puentes con Podemos

Iglesias no ve «serio» ofrecerles un «corta y pega» del pacto con Ciudadanos 24 horas antes del debate

Madrid Actualizado: Guardar
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En su estrategia de dejar en evidencia que si no hay gobierno «de cambio» este viernes será porque Podemos no quiere, Pedro Sánchez dio ayer una nueva vuelta de tuerca. Sorprendió al Comité Federal del PSOE, a 24 horas del inicio, este martes, de su debate de investidura en el Congreso, anunciando una oferta de acuerdo «mucho más allá» en materia social que el pacto con Ciudadanos, de momento el único suscrito.

Inmediatamente fue rechazada por Pablo Iglesias vía Twitter: «El PSOE nos envía varios documentos que son un corta y pega de su pacto con C’s, escondiendo las medidas mas vergonzosas. Esto no es serio». Y el líder socialista le replicó también usando esa red social: «De vosotros depende que estas medidas arranquen el #GobiernoDelCambio.

No es serio que siga Rajoy».

En el fondo, la trifulca revela el enfrentamiento soterrado entre ambos durante estas últimas semanas, del cual Sánchez ofreció algún detalle al máximo órgano entre congresos de los socialistas. Por ejemplo, que ambos han mantenido varias reuniones, además de la cita oficial el 5 de febrero, de las cuales no informaron y en las que Sánchez propuso al líder de Podemos que nombrara una comisión negociadora mientras éste se negaba insistentemente con el argumento de que «el negociador» era él.

El líder socialista desveló este relato a los dirigentes socialistas para demostrar que, como había dicho minutos antes en su discurso, por él «no va a quedar» y será Pablo Iglesias quien decida si quiere ser «cómplice» de Rajoy.

Lo cierto es que Podemos se negó ayer, una vez más, a lo que considera un teatro de Sánchez, más interesado, dicen, en el relato electoral que en llegar a un acuerdo. Así se lo afeó también en el Comité Federal el miembro de la corriente Izquierda Socialista José Antonio Pérez Tapias, cuando le advirtió de que no puede pretender una «adhesión» de Podemos a última hora. Tapia y otra representante de IS fueron los únicos votos en contra del acuerdo, aprobados por asentimiento.

En Podemos ha molestado, además, que el PSOE intente, una vez más, hacer brecha interna, enviando un documento a Podemos, otro a En Marea y otro a En Comú Podem, intentando socavar el liderazgo de Iglesias.

El líder socialista ha hecho ofertas invidualizadas a IU y Compromis, que básicamente, retoman la «agenda valenciana (deuda histórica)» en el caso de Compromis. Por la tarde, el portavoz del Grupo Socialista, Antonio Hernando, lamentó el rechazo de todos ellos a la oferta y dijo que no hace falta esperar a la investidura fallida de Sánchez.

Iceta y el «anticatalanismo primario» de C's

En el Comité Federal de ayer no pasó desapercibida la intervención del primer secretario del PSC, Miquel Iceta, fiel aliado de Pedro Sánchez, para que explicar por qué cree que el sábado solo participaron en el referéndum el 31,02% de los socialistas catalanes, frente a una media de participación del 51,7% en toda España.

Es culpa del «anticatalanismo primario» que destila Ciudadanos, ahora socio preferente del PSOE, el cual deja al PSC en una posición muy incómoda de cara a la resolución del conflicto en Cataluña. Salvo Iceta, que habló el primero, ninguno de los otros «pesos pesados» del socialismo tomaron la palabra ayer en una reunión que fue de trámite.

No estuvieron los presidentes de Extremadura, Guillermo Fernández Vara; Comunidad Valenciana, Ximo Puig, ni Baleares, Francina Armengol. Por su parte, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, llegó la última, con Sánchez a punto de terminar su discurso inicial de diez minutos, y se marchó de vuelta a Sevilla menos de una hora después, sin tomar la palabra, para no dar lugar a nuevas controversias con Sánchez.

El presidente aragonés, Javier Lambán, que no habló en la reunión, sí mostró en declaraciones a la entrada de Ferraz su preocupación por la incompatibilidad que el pacto con C’s pueda tener en su acuerdo con Podemos en su comunidad. Por eso pidió «alguna clase de cesión» a Podemos para que este partido entre en las alianzas de investidura de Sánchez. «A mí me parece absolutamente fundamental».

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