Moncloa teme que la cerrazón de Ciudadanos y el PSOE abra una crisis constitucional

La actitud de Ciudadanos y del PSOE, que hasta ahora se han negado a sentarse a negociar con el PP, está causando una indignación cada vez mayor en La Moncloa, donde se ve como una «gran irresponsabilidad» la posición de los partidos de Rivera y de Sánchez. En el Gobierno en funciones temen que si el bloqueo político se encona aún más, por la decisión de esos dos partidos, España podría afrontar una grave crisis constitucional.

«Si el único partido que quiere responsabilizarse del Gobierno es el PP, entraremos en un escenario de incertidumbre constitucional, que se uniría a la política y económica», advierten fuentes de Moncloa. «España no se puede permitir que dos de sus tres grandes partidos moderados y constitucionalistas prefieran ser oposición a Gobierno por razones de tacticismo y por puro partidismo», subrayan.

En el entorno de Rajoy consideran que si esta semana se constata que no hay un candidato con apoyos suficientes, por la negativa de algunos a negociar, y empieza a verse más clara en el horizonte la posibilidad de unas terceras elecciones, «desde el punto de vista social muchos pondrían en duda el sistema». «La sociedad encajaría mal que fuésemos a esa situación en vez de investir a un presidente del Gobierno, que es lo que toca y ese es el mandato de las urnas», comentan.

Si el jueves acaba la ronda de consultas del Rey sin un candidato para la investidura, podría abrirse un periodo de reflexión, sí, pero el «reloj» no empezaría a correr. La Constitución prevé un plazo de dos meses desde la primera votación de la investidura antes de convocar de nuevo a las urnas. ¿Pero qué ocurre si esa primera votación no se produce porque no hay candidato? El escenario de unas elecciones quedaría abierto y sin fecha en el futuro.

Desde el Gobierno se recuerda que hay un informe del Consejo de Estado según el cual si no hay un candidato puede haber un acuerdo para que se declare una «investidura fallida» sin votación, y así puede empezar a correr el reloj de los dos meses. En todo caso, sería un imprevisto que la Constitución no recoge. Fuentes del Gobierno advierten de que es un asunto que afecta al Congreso y a la Corona, no al Ejecutivo.