Méndez de Vigo pide calma ante las injerencias extranjeras y asegura un resultado legal el 21-D

Califica de «burda patraña» las supuestas amenazas del Gobierno relatadas por Rovira

El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo EFE
Ana I. Sánchez

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No hay que temer injerencias extranjeras en el resultado del 21 de diciembre. Así de contundente se ha mostrado el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ante el creciente temor de los grupos políticos a que hackers de territorios rusos o venezolanos lleven su actuación en la crisis catalana a una manipulación del resultado electoral del próximo 21-D.

En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, el ministro popular ha asegurado que « no se va a dar, no se puede dar» ningún tipo de interferencia informática en los comicios porque existe un respaldo físico del resultado en las mesas electorales, controladas por los miembros de las mismas y los interventores. «Hay un respaldo presencial del resultado, y en la hipótesis de que hubiera una injerencia informática cotejaríamos con las actas de las mesas y restableceríamos el resultado. Van a ser unas elecciones legales», ha garantizado.

Méndez de Vigo ha lanzado así un mensaje de tranquilidad y ha pedido calma a los partidos políticos después de que la portavoz del PSOE, Margarita Robles, registrara ayer en el Congreso la petición de comparecencia de la vicepresidenta , Soraya Sáenz de Santamaría, en la llamada comisión de secretos oficiales y el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera , exigiera el miércoles al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que adoptara medidas para evitar una manipulación del 21-D.

«Con las elecciones y las interferencias no se juega porque alguien puede estar tentado de desvirtuarlas», ha vendio a advertir a ambos, en la misma línea que se pronunció ayer el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias. « Cualquier información que quieran tener el Gobierno siempre está dispuesto a darla, pero todos debemos de ser prudentes en esta cuestión», ha señalado, dejando ver que la comisión de Secretos Oficiales no le parece el mejor foro para desvelar la información concreta de la que dispone el Gobierno.

«El Gobierno siempre está a disposición de las Cámaras pero es un tema importante y tenemos que ser serios y actuar con sentido de Estado», ha apuntado. En esta línea, ha asegurado que Moncloa está abierta a ver «cuál es la mejor manera de dar esa información a los grupos parlamentarios».

El portavoz del Ejecutivo sí ha querido reconocer en cambio la posible existencia de «comunicaciones» desde el extranjero para agravar la crisis catalana. Y ha subrayado que la mayoría de las noticias falsas partieron de servidores ubicados en Venezuela y Rusia. En este punto, ha queridio hacer hincapié en que este problema no solo atañe a España sino que es «un tema transnacional que requeire respuestas europeas».

«Una burda patraña»

En otro orden de cosas, ha calificado como «una burda patraña» las acusaciones vertidas por la secretaria general de ERC, Marta Rovira , sobre amenazas de violencia extrema y muertos en las calles recibidas desde Moncloa, si la Generalitat no abandonaba la vía de la independencia.

« Los dirigentes secesionistas están acostumbrados a mentir » ha subrayado, recordando en la rueda de prensa al Consejo de Ministros como los líderes secesionistas aseguraron por ejemplo que la independencia no tendría efectos económicos o que serían provechosos y que su causa tendría el apoyo europeo. «Mentira tras mentira... es una burda patraña que no tiene nada que ver con la realidad», ha criticado el Méndez de Vigo.

«Puigdemont dijo que asumiría las consecuencias políticas y que no se presentaría a las elecciones y ya vemos donde está, los catalanes tienen que tomar nota de quien miente por sistema», ha reclamado. En esta línea, ha confiado en que el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, no recupere su cargo tras las elecciones del 21 de diciembre. El Gobierno cree que los catalanes han tomado buena nota y espera que los que fueron responsables no sean interlocutores a partior del próximo 22 de diciembre».

También ha señalado el deseo del Ejecutivo porque las autoridades belgas activen la orden de entrega cuanto antes. No obstante, ha asegurado que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no ha hablado sobre esta cuestión con el primer ministro belga al tratarse de un tema estrictamente judicial sobre el que ninguno de ellos tiene competencias.

Impacto sobre la economía catalana

El portavoz del Gobierno también ha querido hacer una recopilación de los datos que recogen el impacto que la crisis catalana está teniendo en la economía de aquella autonomía y del país. Así ha recordado que la prima de riesgo ha sabido hasta los 116 puntos básicos , frente al nivel de 85 o 90 que le correspondería , y ha advertido que la calificación crediticia de España se habría elevado hasta el notable alto.

En cuanto a Cataluña. la economía habría crecido al 3,6% y hubiera evitado el cambio de domicilio social de 2.500 empresas. Méndez de Vigo ha continuado señalando que el paro en Cataluña registró en octubre su mayor subida desde 2008, en un contexto de pérdidas de autónomos, caídas de la ocupación y facturación hotelera , así como caídas de actividad del comercio minorista y de los sectores textil y de automoción.

Reforma constitucional

Sobre la reforma de la Constitución, Méndez de Vigo ha subrayado que el compromiso adquirido por Rajoy con el líder del PSOE, Pedro Sánchez, se circunscribía a la apertura de la comisión territorial, obviando la posterior apertura de una subcomisión específica, pero ha hecho hincapié en que ello no significa que la Carta Magna vaya a ser modificada. «Habrá que ver si hay acuerdo y qué mayorías respaldan ese acuerdo» , ha advertido. «Hay que hacerlo (la reforma constitucional) con apoyos para que salga adelante. No podemos predecir el resultado de una comisión que se ha constituido antes de ayer, en seis mese se hará esa valoración», ha remachado.

A su juicio, la actualización del texto constitucional es «buena» para España pero siempre y cuando exista el mismo nivel de consenso que existió para aprobarla. Y respecto a ello ha apuntado directamente a ERC y PDECat que, de momento, se niegan a sentarse en la mesa de la nueva comisión territorial. No obstante, ha pedido evitar una mirada «negativa» se ver los trabajos. «Hay buena voluntad por los tres grupos y vamos a hacer un análisis serio y ponderado. Veremos qué modificaciones pueden introducirse para mejorar el texto constitucional», ha cerrado

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