Así es la estrategia de Puigdemont para eternizar la orden de detención europea

El expresidente catalán aún tiene dos escalones para recurrir, lo que significa meses de prolongar el procedimiento

Vídeo: Arranca la campaña catalana con Puigdemont presente desde un plasma
Enrique Serbeto

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La justicia belga se pronunciará el próximo día 14 sobre la petición de orden de detención tramitada por un tribunal español contra Carles Puigdemont . El expresidente de la Generalitat y los cuatro antiguos miembros de su gobierno comparecieron ayer lunse ante un juez de Bruselas y por primera vez expusieron sus argumentos de defensa, con la idea de retrasar todo lo posible su entrega, lo que descarta completamente su participación en la campaña electoral.

En una de sus declaraciones a medios afines, Puigdemont también ha descartado volver por su propia voluntad, por lo que su principal perspectiva personal es quedarse en Bélgica «ad eternum» en condiciones precarias, porque si volviese en algún momento a pisar territorio español sería detenido inmediatamente, independientemente de lo que puedan decir los jueces belgas.

La comparecencia de los prófugos se produjo en las mismas circunstancias que las anteriores gestiones en el Palacio de Justicia, es decir, sin ser vistos ni hacer declaraciones. La Audiencia tuvo lugar en flamenco, como habían pedido los dirigentes catalanes, con traducción al español, y además de los abogados solo intervinieron el propio Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí .

Sus abogados están preparando una estrategia basada en el hecho de que a su juicio el traspaso de la causa de la Audiencia Nacional al Tribunal Supremo constituye una prueba de la irregularidad del procedimiento y de la falta de competencia de la juez que tramitó la orden europea. El equipo de 19 letrados, encabezados por el defensor de etarras Paul Bekaert , han intentado convencer al juez belga (flamenco) de que hay un montón de asideros para que se niegue a aceptar la orden de detención o que en su defecto acepte limitar los delitos por los que puede ser perseguido en España. Y si ello no fuera posible, aún les quedan dos instancias para recurrir dentro de Bélgica, y es posible que también a la justicia europea.

La Fiscalía ha pedido claramente que se acepte la orden europea de detención y que los cinco dirigentes independentistas sean entregados a la justicia de un país democrático, miembro de la UE y aliado de Bélgica. Puigdemont y los demás exmiembros del gobierno regional catalán llevan ya casi un mes en Bélgica, en una situación de libertad vigilada, intentando seguir influyendo en la campaña electoral desde allí.

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