Colau sigue con el «enchufismo» y ficha a su sucesor en la PAH

Carlos Macías, que era el portavoz de la plataforma de vivienda, trabajará como asesor

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en un acto en la ciudad condal el pasado mes de enero EFE

ANNA CABEZA

Nueva contratación a dedo en el Ayuntamiento de Barcelona. El gobierno de Ada Colau acaba de fichar a quien la sucedió como portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Carlos Macías, cuando ella se adentró en la política municipal. Macías, que hace unos meses dejó la portavocía del movimiento social, ha sido contratado como asesor del gabinete de alcaldía en materia de vivienda.

El exactivista se incorporó la semana pasada al equipo técnico de Colau como personal eventual. Fuentes del consistorio resaltaron que en condiciones normales Macías tendría derecho a percibir un sueldo de 51.290 euros brutos anuales pero que, al estar sujeto al Código Ético que rige los cargos municipales de BComú, acabará cobrando 2.000 euros mensuales en 14 pagas. La diferencia la destina el partido a proyectos sociales. Macías se encargará de reforzar el trabajo municipal sobre políticas de vivienda social, contra la gentrificación y la coordinación entre barrios en esta materia, un campo que en las últimas semanas, y tras meses de inacción y de críticas por parte de la oposición, la alcaldesa está intentando potenciar.

Fuentes municipales destacaron ayer a ABC que, con casi un centenar de cargos, el mandato actual es el que menos personal eventual tiene. Además, reiteraron que la contratación de Macías no incumple el Código Ético que impulsó el gobierno de Colau y que si se ha escogido a este antiguo miembro de la PAH es precisamente por su experiencia en políticas de vivienda.

¿Silenciar la PAH?

Sin embargo a nadie se le escapa que las relaciones entre el Ayuntamiento y la plataforma que creó Colau y que la catapultó a la política municipal se habían tensado en los últimos tiempos. La PAH ha sido especialmente crítica por las pocas actuaciones llevadas a cabo por la alcaldesa en materia de vivienda. Hace poco más de un año le exigieron en una misiva « valentía política y determinación », y en el entorno de la entidad se cuestionó si la alcaldesa se había aprovechado de la plataforma como trampolín personal. Es en este mismo contexto donde algunas voces creen ahora que la alcaldesa ficha a Macías para intentar silenciar a la PAH.

El de Macías es solo el último de una lista de nombres que han pasado a formar parte del equipo municipal con sospechas de «enchufismo» . El más sonado de ellos fue la contratación de la pareja de la propia alcaldesa, Adrià Alemany, que, con sueldo municipal, forma parte del equipo de Barcelona en Comú en el consistorio como responsable de relaciones institucionales y políticas. Gerardo Pisarello, el número «dos» en el Ayuntamiento de Barcelona, también tiene a su pareja trabajando en el consistorio. Vanesa Valiño fue contratada cuando el gobierno llevaba apenas un mes en el Ayuntamiento para trabajar como asesora de vivienda para la concejalía municipal que lleva este nombre.

Curiosamente, Colau, Alemany, Pisarello y Valiño coincidieron hace unos años en el Observatorio DESC (Derechos Económicos, Sociales y Culturales), plataforma en la que estuvieron también otros miembros del gobierno Colau, como la concejal de Ciutat Vella y de Participación, Gala Pin o Àgueda Bañón, la actual jefa de comunicación del Ayuntamiento.

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