Cataluña y Euskadi, las únicas comunidades donde no gana ni el PP y el PSOE

En la primera la fuerza más votada es Comú Podem y en la segunda es Podemos, aunque logra un escaño menos que el PNV

MADRID Actualizado: Guardar
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El mapa de resultados de estas elecciones generales del 20D dejan estampas como esta: Cataluña y Euskadi, las dos únicas comunidades donde no gana ni PP ni PSOE. En ellas el nacionalismo pierde peso desplazado por Podemos, pero puede ser clave para los pactos.

En concreto en Cataluña es Comú Podem (ECP), la alianza que apoya a Podemos, la fuerza más votada. Saca 12 escaños, mientras que Democràcia i Llibertat, la marca de la CDC de Artus Mas, queda cuarta, con 8 diputados, superada por ERC (9) y PSC (8). El partido de Artur Mas y su cabeza de lista, Frances Homs, pierden la mitad de su representación en el Congreso al pasar de 16 diputados a ocho.

Presentes en todas las legislaturas, se trata del peor resultado de su historia igualando el cosechado en los comicios generales de 1979. Por su parte Unió, que acudía en solitario encabezada por su líder Josep Antonio Duran Lleida abanderando el nacionalismo moderado se ha quedado fuera y no obtiene representación.

En Euskadi Podemos también se situa como primera fuerza política en número de votos pero logra un escaño menos que el PNV, que es el partido que más escaños ha logrado en estas elecciones generales, al obtener seis diputados con 301.585 votos, uno más que en los comicios de 2011.

Quien parece haber acusado especialmente la entrada en escena de Podemos en una elecciones generales es Bildu, que pasa de seis escaños a tan sólo dos en el País Vasco, donde se ha dejado 100.000 votos con respecto a las pasadas generales donde se presentaron bajo las siglas de Amaiur. Los abertzales también pierden el escaño que lograron hace cuatro años en Navarra, donde se han dejado 20.000 votos.

En la comunidad foral tampoco logra mantener su escaño Geroa Bai pese a ser el principal partido de Gobierno en Navarra tras las elecciones autonómicas de mayo. Pierde 12.000 votos con respecto a hace cuatro años y se sitúa como quinta fuerza en una región donde Podemos se alza al segundo puesto por detrás de UPN. Los nacionalistas vascos tenían representación por Navarra desde hace 11 años.

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