Así llegan Trump y Clinton al primer debate, el más esperado de los últimos 50 años en EE.UU.

La incertidumbre subirá la audiencia. Se prevé que 100 millones de estadounidenses vean el debate (de 03.00 a 4.30 horas puedes seguirlo en abc.es), más que nunca, y los más optimistas vaticinan que uno de cada tres estadounidenses puede cambiar su voto o simplemente decidirse por uno de los dos contrinctantes por esta contienda. En un lado del ring, la «fría e irritable» Hillary Clinton, al otro, el «mentiroso compulsivo» Donald Trump. La demócrata llega al primero de los debates, serán tres, en cabeza pero por poco. Según como lo hagan esta noche los candidatos, la recta final de la carrera electoral puede ser de infarto.

Las últimas encuestas de Reuters apuntan a que la candidata demócrata tendría el voto favorable del 41% de los votantes, por el 37% de su rival republicano, Donald Trump.

Para el portal especializado Politico, la diferencia es favorable a Clinton por un 46% frente a 42%. Y el The Washington Post apuntó el domingo un 46%-44% para la primera candidata a presidenta del país. Por su parte, la casa de apuestas Betfair le concede a Clinton un 62% de posibilidades de victoria.

«Ella tiende a estar a la defensiva cuando cuestionan su honestidad y honradez. Está entrenando una respueta clara y contundente sobre su uso de un servidor de email privado como secretaria de Estado», analiza The New York Times. Trump la ha llamado «perdedora» muchas veces y juega con las presuntas aventuras del expresidente Bill Clinton para ridiculizarla. Incluso ha amenazado con invitar a Gennifer Flowers, una supuesta examante del marido de Hillary. Escribe el periódico neoyorquino, que se ha posicionado a favor de la demócrata, que el sello Trump se basa en insultar y ridiculizar a su oponente, al moderador y a quien sea. «Miente a menudo y usa información incorrecta. Incluso recurre a teorías de conspiración», añade. «Ella debería argumentar directamente ante la cámara y el pueblo estadounidense, refiriéndose a Trump sin buscar el enfrentamiento», escribe el consultor político David Axelro, que asesoró a Obama, en su artículo en The New York Times dirigido a Clinton. Le recomienda sobre todo no caer al fango de respuestas impertinentes e insultos de Trump.

Vista la trayectoria del magnate, «demostrar que Trump miente, no basta» para ganar. Clinton llamó «deplorables» a parte de los seguidores del líder republicano. «Es peligroso criticar a Donald Trump sin que parezca que se insulta a sus votantes», reflexionaba el semanario británico The Economist. Otro frente abierto para Clinton es el voto de los «millenials», los menores de 35 años, que se decantaron por Barack Obama y Bernie Sanders en el pasado, y que aún no se han decidido por Clinton, cuyo apoyo incluso se ha reducido en los últimos días, según The Washington Post.

«18% de indecisos»

«Five Thirty Eight», uno de esos portales especializados que están al alza en EE.UU., concede a Clinton un 58% de favoritismo. Destaca la gran masa de votantes indecisos. «El 18 por ciento del electorado todavía no se ha decidido por uno de los grandes partidos, comparado con un 6% de las pasadas elecciones a estas alturas», agrega.

Clinton recupera terreno

En los últimos días, Clinton parece haber recuperado un poco de ventaja frente a Trump, aun así, los sondeos otorgan a la demócrata apenas un punto más en Colorado y dos en Pennsylvania, según recoge «FiveThirtyEight». Son dos de los llamados «estados en disputa».

¿Qué estados son clave?

El think tank Hispanic Council apuntaba hace unos días que 11 estados, donde las encuestas vaticinan un resultado muy ajustado, podrían inclinar la balanza. Los tres estados donde los números están más apretados en la primera semana de septiembre eran Florida, Ohio y Carolina del Norte.

¿Qué caras mostrarán?

Disciplinado y con una retórica parecida a la de los los tuits que le escribe el equipo campaña, o el empresario arrogante, impulsivo, que suelta lo primero que se le pasa por la cabeza. Trump puede ser ambos perfiles, pero, como según apuntan los expertos, su gran desafío consiste en parecer presidenciable. Por su parte, Clinton puede ir al ataque para provocar a Trump y que saque su mal temperamento, escribe un analista de «La Nación». La demócrata debe convencer al electorado, nada fácil dada la falta de credibilidad que señalan los sondeos. Obama le dio un consejo: «Sé tú misma». ¿Eso le gustará a los espectadores?

Temas

Ya se han anunciado tres temas: «La dirección del país»; «Camino a la prosperidad» y «Protegiendo a Estados Unidos». Con respecto a este último punto, según un reciente estudio del FBI, en 2015 se registró un incremento de los crímenes violentos con respecto al año anterior, en particular en las grandes ciudades, aunque subrayan que estos niveles están aún muy por debajo de los de la década de 1990.