El andamio del Palacio de Winthyussen, a la espera de la decisión de la Junta

Rapidez es lo que quiere el Ayuntamiento para afrontar un problema, como es el desmontaje del andamio del palacio de Winthyussen, que se alarga en el tiempo y que afecta a los portuenses que pasean por la calle Larga. Una estructura metálica que se encuentra instalada desde hace años y ocupa todo el ancho del tramo de acera, lo que no permite a los peatones circular por ella, teniendo que cruzar la calle para r continuar su camino.

Recientemente el Consistorio mantuvo una reunión con la entidad bancaria, actual propietaria, para que finalmente se puedan realizar las obras necesarias y se despeje la calle del andamio. En el encuentro el banco explicó que han presentado en la Delegación Provincial de Cultura un nuevo proyecto para la consolidación del edificio.

La entidad bancaria expresó que la futura actuación se encuentra actualmente en manos de la Junta de Andalucía, que es la que tiene que dar la aprobación, ya que es un inmueble con especial protección. El Área Municipal de Urbanismo ha vuelto a solicitar celeridad para que una vez aprobado el proyecto, las obras comiencen en el menor tiempo posible y se pueda retirar el andamio. «Es uno de los principales objetivos que la calle quede libre para los viandantes», afirman desde la Concejalía de Urbanismo. Este tema también fue tratado, hace unas semanas, por el Consejo de Participación Ciudadana. En donde se dejó patente por parte de los vecinos la molestia que supone esta estructura en mitad de la calle.

Cabe recordar que el pasado 19 de febrero, se anunció la retirada del andamio ya que durante el mes anterior se habían comenzado a desarrollar los trabajos para apuntalar la fachada. Días después del anuncio se procedió al desalojo de la parte alta del andamio, hasta que se paralizó por completo. En esa ocasión el expediente técnico de dicha labor detallaba que las labores de retirada tienen que simultanearse con la colocación de la estructura interna para salvaguardar la integridad de la fachada del inmueble. Dicha paralización no permitió que los servicios de limpieza procedieran a la limpieza interior del edificio mediante el desbroce de los elementos vegetales, retirada de basuras y desperdicios arrojados, desratización y desinfección.

Posteriormente, en el pasado mes de septiembre. el Ayuntamiento mandó por carta un ultimátum a los directores de los bancos asentados en la localidad para exigirles que hagan posible que las distintas fincas de su propiedad presenten condiciones óptimas de conservación, ya que la falta de cuidados genera mala imagen.