¿Quiénes son los actores del negocio andaluz de cine?

La película «Solas», de la productora sevillana Maestranza Films, vinculada al empresario cordobésAntonio Pérez, llevó al cine andaluz hasta el primer plano de la escena un año antes de que inaugurásemos el nuevo milenio (1999) gracias al talento del director Benito Zambrano. Otras cintas de éxito, como «La isla mínima« o «El hombre de las mil caras», que han consagrado al cineasta Alberto Rodríguez, han visto la luz con el impulso económico de otro productor andaluz, Gervasio Iglesias, cuyas firmas son La Zanfoña y Sacromonte.

Son ejemplos de productoras muy consolidadas, implicadas, incluso, en proyectos de proyección internacional, como el thriller «Domino», del director norteamericano Brian de Palma, que se rodará este verano en la plaza de toros y el puerto de Almería, y en cuya lista de créditos figurará también Maestranza Films, coproductora de la obra.

Pero detrás de este negocio, en Andalucía hay toda una pléyade de creadores, artistas y empresarios que tienen que hacer muchos equilibrios para que les salgan las cuentas. ¿Cuánto cuesta hacer una película en Andalucía? Se estima que un largometraje de ficción medio requiere una inversión de 1,8 millones de euros y un documental, unos 600.000 euros.

La industria regional del cine se articula alrededor de productoras, distribuidoras y exhibidoras y mueve algo más de 120 millones de euros al año, según estimaciones empresariales. ¿Cómo se reparte esta cifra de negocio y cuales son sus principales actores?:

Producción: al calor de Canal Sur

En el periodo 2016 completo y hasta junio de 2017 cinco empresas andaluzas estrenaron 11 largometrajes de ficción y documentales en salas de cine, según el ICAA (Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales). Entre ellas, «Tamara y la catarina», de CADA Films, productora del periodista y empresario Rogelio Delgado; los documentales «Nacido en Siria», de Olmo Figueredo (La Claqueta) o «La fabulosa Casablanca», de José Antonio Hergueta (MLK); o la citada «El hombre de las mil caras», que recrea la historia del espía Paesa.

Si a las empresas que realizaron estrenos se suman las que comenzaron rodaje y las obtuvieron compromisos de adquisición por parte de Canal Sur, se contabilizan 19 productoras de cine andaluzas con dos polos definidos en Sevilla y Málaga. Fuentes del sector estiman que la producción mueve unos 20 millones de euros al año en Andalucía (por ingresos en taquilla, venta de derechos, subvenciones...) y emplea a unas 100 personas.

«No somos un sector potente en producción si nos comparamos con Madrid, Cataluña o País Vasco. Podemos homologarnos con Valencia y Extremadura. No hay un ecosistema propicio para que esta actividad se desarrolle, aunque hay talento. Solo Canal Sur actúa de motor de arrastre», señalan fuentes empresariales. La futura Ley autonómica del Cine, anunciada para este mismo año, cuyo borrador inicial sufrió un serio varapalo en Defensa de la Competencia y que está siendo revisado, es uno de los frentes abiertos sobre los que el sector mantiene reservas a la hora de opinar.

Distribución: el gran cambio

Las empresas de distribución de cine son las que más han cambiado en la última década. Aquellas grandes sacas de rollos de películas que había que repartir cuando reinaba el cine analógico han desaparecido al llegar la digitalización a las salas y la distribución vía satélite. Se estima que esta actividad genera por encima de 6 millones de euros de negocio y emplea a unas 50 personas. European Dreams Factory, del empresario Filomeno Martínez de Aspe; Cada Films (la única productora transversal, que opera en las tres patas del negocio), de Rogelio Delgado; y Yoo Feel, de los empresarios Esperanza Moreno y Raúl Díaz, especializados en organizar emisiones de películas a demanda, son los principales actores de la distribución cinematográfica regional.

Exhibición: el peso de las multinacionales

Es el pilar más importante del sector en Andalucía en términos cuantitativos: 531 salas agrupadas en 63 cines, que facturan alrededor de 93 millones de euros por ingresos en taquilla y emplean a unas 3.000 personas. La entrada en los últimos años de grandes multinacionales de la exhibición de películas en el mercado andaluz ha mermado mucho el peso del sector empresarial regional, que llegó a ser muy potente. Entre estos movimientos destaca el de la francesa MK2, que compró Cinesur (la cadena de cines del grupo cordobés Sánchez Ramade), malogrando un intento local por quedarse con este activo.

También los cines Ábaco de Camas pasaron a manos de Cinesa, exhibidora controlada por el fondo británico Terra Firma, que tiene una extensa presencia en Andalucía (en Málaga, Cádiz o Sevilla, donde gestiona las cinco pantallas del centro comercial Plaza de Armas).

Como exhibidora andaluza destacada se ha consolidado la histórica Unión Cine Ciudad (UCC), de la familia Hernández, que posee las salas de Los Arcos, Alameda, Avenida o el cine Cervantes de Sevilla. Caras visibles de esta empresa son Segismundo Hernández, presidente del grupo y tercera generación de la saga. Artesiete (de Juan y Carlos Chiclana), Al Andalus/Cinépolis (Filomeno Martínez de Aspe), Odean (Luis Millán) o la francesa MK2, con sede social en Córdoba, gestionada por Álvaro Pastor, componen el tejido principal de esta pata de la gran pantalla.

Según la información recabada, las multinacionales del sector de exhibición de películas concentran ya el 39% de las salas de cine en Andalucía. Por su parte, las empresas andaluzas agrupan el 49% de las pantallas.