Dirk Hoke, CEO de Airbus DS, y Fernando Alonso, primer directivo del grupo en España, ayer en Sevilla
Dirk Hoke, CEO de Airbus DS, y Fernando Alonso, primer directivo del grupo en España, ayer en Sevilla - PEPE ORTEGA

El A400M recupera el ritmo de entregas tras un convulso 2016

Airbus congela la producción del avión C295 dos años hasta que haya más pedidos

SEVILLA Actualizado: Guardar
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Airbus quiere mirar hacia adelante tras la crisis suscitada en enero de 2016 en el programa del A400M —el avión europeo de transporte militar que se ensambla en Sevilla—, tras desvelarse los nuevos problemas con los motores y el fuselaje. Por ello, ha pedido «comprensión» a los países clientes para que no exijan penalizaciones por los retrasos en las entregas y «esperen a ver cómo se adapta el nuevo plan» diseñado por al compañía. Así lo expresó ayer en la capital hispalense el consejero delegado de Airbus Defense and Space, el alemán Dirk Hoke, tras visitar las factorías andaluzas en Cádiz y Sevilla y reunirse con directivos y trabajadores.

«Hemos tenido muchas malas noticias sobre el A400M, que especialmente procedían de Alemania, y ahora es importante trasmitir que es un avión complejo, el más moderno del mercado, y que los clientes que lo usan lo quieren tener», subrayó.

Junto a Fernando Alonso, director de Military Aircraf y principal ejecutivo del grupo aeroespacial europeo en España, Hoke reconoció que dichos problemas técnicos han hecho «mucho daño» al programa, aunque confió en que los países impulsores «nos ayuden a terminar el proyecto sin que se vuelvan a causar tantos daños como en el pasado». Hay que recordar que el presupuesto estimado de este programa era de 24.000 millones de euros y que Airbus tendrá que afrontar un sobrecoste extra de otros 7.000 millones para completarlo, según las cuentas oficiales.

Pese a las dificultades, en 2016 Airbus logró servir 19 aviones A400M a los clientes y ya suma 43 entregas. Para este año confía en que salgan de la Línea de Montaje Final de San Pablo en Sevilla entre 19 y 22 aparatos más. «Hemos hecho un esfuerzo grande, especialmente del equipo en Sevilla, que ha estado inmenso y ha trabajado hasta de noche y en fines de semana», indicó el consejero delegado, tras recordar la complejidad de la situación, que obligó a un segundo montaje de los motores para corregir los defectos.

«Desde el año pasado la producción y las entregas están muy estabilizadas. Los fuselajes y las alas llegan en buenas condiciones de Bremen y Filton y el equipo trabaja de forma rítmica en la línea de ensamblaje final», manifestó Fernando Alonso.

Sobre la campaña de exportaciones, para lograr captar nuevos clientes, no hay nuinguna novedad

Avión C295

Por otro lado, Airbus mantendrá congelada durante este y el próximo año la producción del otro avión militar importante que Airbus fabrica casi en su totalidad en Sevilla, el C295, hasta que no supere el bache de pedidos. Así, ha programado 10 aparatos para cada ejercicio, una reducción significativa respecto a los 16 de media en años atrás.

Dirk Hoke explicó que la compañía está desarrollando nuevas versiones y sistemas del C295, un «avión clave», dijo, para adaptarlo a las exigencias de los clientes. En este sentido, avanzó que en fechas próximas se dará a conocer una prestación innovadora de este modelo que permitirá combinar el transporte con las misiones militares, ofreciendo distintas configuraciones en un mismo aparato.

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