Francina Armengol, presidenta de Baleares
Francina Armengol, presidenta de Baleares - EFE

El Parlamento balear aprueba la implantación de la «ecotasa»

El PSOE, la coalición econacionalista MÉS y Podemos han votado a favor del nuevo impuesto turístico, mientras que el PP y Ciudadanos han votado en contra

Palma de Mallorca Actualizado: Guardar
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El pleno celebrado este martes en el Parlamento balear ha aprobado el denominado «impuesto sobre estancias turísticas y de medidas de impulso del turismo sostenible», conocido popularmente como la «ecotasa». Este proyecto de ley había sido aprobado inicialmente el pasado mes de enero por el Ejecutivo balear, que preside la socialista Francina Armengol. La sesión de este martes se ha iniciado con un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los atentados terroristas en Bruselas.

Tras el debate previo sobre el nuevo impuesto turístico, han votado a favor de la implantación de la «ecotasa» el PSOE, la coalición econacionalista MÉS y Podemos, que finalmente han conseguido dejar a un lado las discrepancias que han mantenido hasta el último momento sobre el contenido de la nueva ley.

Por su parte, la formación sucesora de la extinta UM, Proposta per les Illes (PI), ha apoyado algunos puntos, mientras que el PP y Ciudadanos han votado en contra. Esta última formación se ha abstenido, no obstante, en algún punto de la nueva ley.

La nueva «ecotasa», que en principio entrará en vigor a partir del 1 de julio de este año, supondrá el cobro de una tasa diaria de entre 0,25 y 2 euros para los visitantes o para los residentes mayores de 16 años que se alojen en establecimientos hoteleros reglados del Archipiélago. El proyecto prevé, no obstante, la aplicación de bonificaciones y de descuentos en temporada baja. El Ejecutivo balear espera recaudar con dicho impuesto unos 80 millones de euros al año, que se destinarían a la rehabilitación de zonas turísticas degradadas y a la conservación de espacios naturales. El sector hotelero de las Islas, por su parte, ha expresado de manera reiterada su oposición a la aplicación de la «ecotasa», al considerar que será perjudicial para el turismo.

Cabe recordar que Armengol gobierna en Baleares desde el pasado mes de junio, cuando el PSOE, MÉS y Podemos suscribieron un acuerdo de gobernabilidad. El Ejecutivo regional está integrado, sin embargo, sólo por consejeros del PSOE y MÉS, ya que Podemos sólo ofrece por ahora su apoyo externo.

En estas últimas semanas, las divergencias entre los tres socios habían sido constantes en relación al uso que debería darse al dinero recaudado con la «ecotasa». El pasado mes de febrero, por ejemplo, Podemos se abstuvo en la votación de las enmiendas a la totalidad presentadas por el PP y por C's. Aun así, el voto contrario del PSOE y de MÉS a dichas enmiendas fue suficiente para que la tramitación de la «ecotasa» pudiera seguir entonces adelante.

Un nuevo desencuentro se produjo también en la comisión parlamentaria de la pasada semana, cuando Podemos votó junto con el PP y C's contra la pretensión del PSOE y de MÉS de que la «ecotasa» pudiera servir también para financiar infraestructuras sociales y sanitarias. A pesar de ello, los integrantes del actual tripartito llegaron a un acuerdo de mínimos sobre la distribución de los fondos recaudados, si bien dicho acuerdo no forma parte de la norma aprobada este martes. En principio, el 60 por cien de los fondos se destinará a financiar proyectos en Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera de manera proporcional, mientras que el uso del 40 por cien restante será decidido por el Ejecutivo autonómico.

En la legislatura 1999-2003 ya fue implantada una primera «ecotasa» en Baleares. El presidente autonómico era en aquel momento el socialista Francesc Antich, gracias al llamado Pacto de Progreso, que estaba conformado por el PSOE, Unió Mallorquina (UM), el Partido Socialista de Mallorca (PSM), Izquierda Unida y Los Verdes. Ese primer impuesto turístico, que se empezó a aplicar en mayo de 2002, fue derogado por el popular Jaume Matas en octubre de 2003, cuando accedió por segunda vez a la presidencia de la Comunidad. Antich volvería a ser presidente autonómico en la legislatura 2007-2011, con el apoyo de la coalición BLOC —antecesora de MÉS— y de UM, pero no volvió a implantar la «ecotasa».

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