Fedea calcula que las pensiones bajarán un 15% hasta 2050

Año 2050, España ha conseguido el pleno empleo y, pese a ello, hay un jubilado por cada trabajador y la creación de puestos de trabajo solo ha servido para compensar una quinta parte del aumento del gasto en pensiones por el envejecimiento de la población. Es el escenario probable calculado por un informe presentado ayer por Fedea, que estima que aún en una hipótesis favorable del lado demográfico, y con pleno empleo el agujero de las pensiones será de 7,4 puntos del Producto Interior Bruto, es decir, 80.000 millones de euros más de gastos que de ingresos. Para ello, Fedea proyecta una tasa de empleo –porcentaje de la población en edad de trabajar con un empleo remunerado– del 73% «una de las más altas de los países industrializados» frente a la actual, del 61,1%.

El documento, elaborado por el subdirector de Fedea y profesor de la Universidad Complutense, José Ignacio Conde-Ruiz, calcula que que con la entrada del factor de sostenibilidad, la pensión bajará un 15% para 2050.

«En la reforma de 2013, el factor de sostenibilidad, que liga la pensión a la esperanza de vida, y que entrará en vigor en 2019 tendrá un impacto sobre las nuevas pensiones reduciéndolas un 5% cada 10 años aproximadamente. Esto quiere decir que los pensionistas que se jubilen en 2050 tendrán una pensión que será aproximadamente un 15% inferior a la de los que se jubilen hoy con el mismo historial laboral», desgrana el informe, que añade que la pensión media caerá menos, entorno a un 7,5% ya que la mayoría de los pensionistas se habrán retirado mucho antes.

En pleno debate sobre la reforma de las pensiones en la Comisión del Pacto de Toledo, Fedea además rechaza que ni creando empleo, ni subiendo salarios, ni aumentando las cotizaciones sociales ni utilizando los impuestos, se puede evitar el recorte de las pensiones.

«La solución pasará por una batería de medidas entre las cuales están, por supuesto, las contempladas en el apartado anterior: alcanzar el pleno empleo, eliminar la precariedad laboral para aumentar las tasas de fecundidad, mejorar la educación para aumentar la tasa de crecimiento de la productividad y aumentar los ingresos del sistema de pensiones», resuelve.

Junto a ello, Conde-Ruiz propone, un sistema de cuentas nocionales, es decir, todo lo que el trabajador cotiza a lo largo de su vida laboral calculado aplicando ciertas reglas que tienen en cuenta la esperanza de vida en el momento de la jubilación y variables como la ratio de cotizantes y jubilados o el crecimiento del PIB. Este sistema se implanta en Suecia o Italia. En España se utilizan los años trabajados, las bases de cotización de los últimos 25 años, la edad de jubilación y los múltiples umbrales (máximos y mínimos) sobre las pensiones y las bases de cotización.

«Un sistema como este, permite de una forma mas justa y transparente que si un trabajador quiere cotizar más en su “cuenta nocional” puede alargar su etapa laboral, y así aumentar su pensión y evitar la caída en su tasa de sustitución», destaca Fedea.