España capta 5.000 millones con una emisión a 10 años ligada a la inflación

España ha captado hoy 5.000 millones de euros en una emisión sindicada en la que los bancos colocan directamente la deuda entre inversores, a un plazo de 10 años y con una rentabilidad ligada a la inflación europea, con lo que cubre ya el 43,8 % del objetivo anual a medio y largo plazo.

Se trata de la quinta referencia de valores del Tesoro indexados a la inflación europea, una estrategia iniciada en 2014 con el objetivo de diversificar las fuentes de financiación y alargar la vida media de la cartera de deuda del Estado. De hecho, gracias a esta colocación, la vida media de la cartera de deuda del Estado se situará en 7,06 años.

La demanda ha superado los 16.400 millones de euros, lo que ha permitido abaratar la colocación, según han explicado a Efe fuentes próximas a la operación.

La nueva referencia a 10 años, con un vencimiento el 30 de noviembre de 2027 y un cupón real del 0,65 %, ofrece una rentabilidad del 0,733 %, 65 puntos básicos por debajo del bono italiano de plazo equivalente, explica el Ministerio de Economía en una nota.

El apetito por esta emisión ha permitido al Tesoro asignar la deuda entre 163 cuentas, muy diversificadas por tipo de inversor y por zonas geográficas. La participación de inversores extranjeros ha alcanzado el 62,7% de la sindicación; de este porcentaje destaca la participación de Reino Unido y Francia, con un 25,3% y un 14% de la emisión, respectivamente.

Los países nórdicos han participado con un 4,4% y el resto de Europa, con un 10,1%, en tanto que Estados Unidos y Canadá han participado con un 8,9%.

Tipo de inversión

Atendiendo al tipo de inversor, la mayor participación ha correspondido a las gestoras de fondos y bancos, con un 30,9% cada uno; fondos de pensiones y aseguradoras participaron con un 13,9% del total, seguido de bancos centrales e instituciones oficiales, con un 13,6%, y fondos apalancados, con un 10,7%.

El Tesoro Público ha contado con la colaboración de BNP Paribas, CaixaBank, Citi, HSBC, Morgan Stanely y Société Générale para llevar a cabo esta colocación fuera del calendario oficial.

España ha aprovechado el buen momento que viven los mercados de deuda tras la primera vuelta de las elecciones francesas, en las que se impuso el candidato más europeísta, Emmanuel Macron, y que provocó fuertes caídas de las primas de riesgo de la zona euro.

Las emisiones a largo plazo ligadas a la inflación son uno de los activos más demandados en estos momentos por los inversores de renta fija.