Cabify niega las acusaciones de competencia desleal y afirma que su principal negocio es poner en contacto a conductores y clientes
Cabify niega las acusaciones de competencia desleal y afirma que su principal negocio es poner en contacto a conductores y clientes - ABC

«Cabify» niega que haga competencia desleal al taxi y afirma que cumple con sus obligaciones fiscales

La startup española afirma que los chóferes que colaboran con la red tienen un contrato mercantil de servicios, y niega que estén dando de alta a autónomos, y en lo que respecta a las licencias de vehículos con conductor para alquiler (VTC), afirma que son intermediarios en su venta a terceros

Madrid Actualizado: Guardar
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La denuncia presentada ante el Ministerio de Empleo y Seguridad Social por parte de Fedetaxi y del Sector Estatal de Carretera de la Federación de Servicios al Ciudadano de Comisiones Obreras contra la startup española «Cabify» por competencia desleal, al sustituir supuestamente a trabajadores por cuenta ajena por falsos autónomos, ha tenido respuesta en un amplio comunicado en el que la empresa ha negado todos estos extremos y garantizado que cumple con todas sus obligaciones fiscales tanto en España como en los países donde está presentes.

En cualquier caso desde esta app han asegurado a ABC que no tendrán problema en atender a los requerimientos de las autoridades laborales.

La aplicación, que ofrece servicios de transporte privado en términos similares a Uber o Mytaxi, ha destacado que los chóferes - autónomos o empresas- que colaboran con la aplicación lo hacen a través de un régimen de contrato mercantil de servicios.

«Los transportistas que colaboran con Cabify no perciben un sueldo mensual, ni anual de carácter fijo, y sus ingresos vienen de lo que facturen por las horas o servicios realizados», han explicado desde la compañía, quien han negado que «Cabify» dé de alta a autónomos en el momento de iniciar la relación mercantil. También han rechazado que obliguen a estos transportistas a trabajar un mínimo de 60 horas a la semana. Sólo perciben compensación económica por los servicios facturados, explica el comunicado.

A juicio de estas fuentes no hay despidos, sino rescisiones de contratos con unas condiciones establecidas por esta app, y que «serían aceptadas libremente por los conductores al firmar». En todo caso, han negado que las valoraciones en la aplicación sean el único criterio para concluir una colaboración. En esta línea, han aludido a un seguimiento y un diálogo entre ambas partes para solventar los problemas que pudieran surgir.

«Cláusula de no competencia»

Preguntado sobre este extremo, desde la compañía han admitido la existencia de una «cláusula de no competencia» que, según han explicado desde la app, compromete a los transportistas a no usar a la vez otras aplicaciones similares a «Cabify», dentro del tiempo en que estén a disposición de la plataforma.

En todo caso, sí han reconocido estas fuentes el cobro a sus «colaboradores» de una comisión de entre el 20% y el 25% por cada viaje realizado y añadido que la plataforma es «un servicio telemático que pone en contacto a un cliente con un vehículo, que se adapte a sus necesidades». Además de exigir a los poseedores de las licencias VTC (Arrendameinto de Vehículo de Turismo con conductor) que den de alta a sus trabajadores - si los tienen- y esten al día de todas sus obligaciones en material laboral o fiscal.

Sobre la compraventa de licencias, que los denunciantes han atribuido a una forma de reclutar conductores que de forma particular no podrían lograrla y que el presidente de Fedetaxi tachó de «un fraude a la Seguridad Social», desde «Cabify» han replicado que sólo «intermedian» en la compraventa de licencias VTC entre terceros interesados en acceder o dejar esta actividad. De este modo, han asegurado fuentes de la compañía, se da cumplimiento a lo dispuesto en el Reglamento de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres en los artículos 181 y 182. Una norma modificada el pasado mes de noviembre, que fuerza a que los interesados adquieran un mínimo de siete licencias a la vez.

En esta línea, desde la plataforma han alegado que estas licencias no han sido adquiridas a la Administración - tal y como apuntaron los autores de la reclamación ante el Ministerio de Empleo- y preguntados por la profusión de sociedades vinculadas a la matriz original de «Cabify» mencionadas en la reclamación interpuesta- «Maxi Mobility Spain, SL»- como «Sekiz Fiesta Omnibus, SL o Yirmi Alti Fiesta Omnibus, SL», desde «Cabify» han explicado que se ajustan a lo dispuesto por el citado reglamento y que estarían adscritas a licencias VTC para facilitar su transmisión a terceros.

Sede corporativa en Delaware (Estados Unidos)

Por su parte, el en el hecho de que la matriz esté radicada en el estado de Delaware (Estados Unidos) cuya legislación fiscal es bastante favorable a las empresas se debe, según la versión de la plataforma, a una condición de los accionistas estadounidenses que impulsaron la aplicación en Sillicon Valley la startup impulsada por Juan de Antonio en sus inicios.

A lo que matizan esto no es óbice para que las filiales cumplan con las obligaciones fiscales en cada país: «Hace una semana y media abrimos una oficina y creamos una sociedad en Portugal , y lo hemos hecho cumpliendo todos los requisitos», han argumentado desde la compañía.

En la actualidad, entre los accionistas de «Cabify» se encuentran inversores particulares como los hermanos Winklevoss o los fondos de inversiones japonés Rakuten y al español Seaya. Así como empresas como Amadeus.

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