Tejerina pide a Bruselas que suba el precio de intervención de la leche

Isabel García Tejerina, ministra de Agricultura, ha defendido hoy lunes la necesidad de que la Comisión Europea acepte subir el precio de intervención de la leche como «medida excepcional» y «temporalmente» para paliar la crisis que vive el sector lácteo en «la mayor parte» de Estados miembro.

«Estamos pidiendo que haga todos los esfuerzos necesarios para encontrar margen para verdaderamente incrementar temporalmente, como una medida excepcional, la subida de los precios de intervención», ha explicado la ministra en declaraciones a la prensa antes de su reunión con el comisario de Agricultura, Phil Hogan, que se ha mostrado «reacio» a esta petición para no perjudicar la actual política de orientación al mercado del sector lácteo tras el fin de las cuotas.

«Estamos ante una situación excepcional. Una situación excepcional requiere de medidas excepcionales», ha insistido Tejerina, al ser preguntada por las reservas del Ejecutivo comunitario en este sentido. Tejerina ha instado a la Comisión a «profundizar en los reglamentos» y «buscar cualquier resquicio posible para poner encima de la mesa las soluciones que el sector está esperando» para que «se recupere el equilibrio entre la oferta y la demanda y eso tire de los precios hacia arriba».

Contactos con otros países de la UE

La ministra remitirá al comisario el «proyecto de conclusiones» que pactó con sus homólogos de Francia, Italia y Portugal el viernes pasado en Madrid con las peticiones de apoyo concretas para el sector y ha avanzado que seguirá contactando de aquí a la reunión de ministro del ramo de la UE el próximo 7 de septiembre con otros países para «sumar fuerzas» y lograr una Alianza con «una mayoría» de países «que haga ver al comisario que se tiene que mover».

Los cuatro países insisten en que «la Comisión tiene margen para subir temporalmente los precios de intervención» para que «sea atractiva, de tal manera que se retire el producto del mercado y se equilibre la oferta» y le piden «que se ponga en marcha el almacenamiento privado para los quesos». «Pero de una manera que funciones, no como sucedió el año pasado», ha subrayado.

Igualmente, reclaman al Ejecutivo comunitario que «aumente» las ayudas que se pueden anticipar a los ganadores de la Política Agrícola Común, más allá del actual 50% y «mejorar la promoción tanto dentro de la Unión Europea como fuera» para que la Comisión «de verdad abra nuevos mercados». A medio plazo, los cuatro países piden crear un grupo de alto nivel que «analice en detalle todo lo que afecte al sector lácteo» y «extraiga» las consecuencias que luego permitan a los ministros tomar «las decisiones adecuadas» para el sector.

«El Gobierno español va a hacer todo lo que esté en su mano y sea legalmente posible» para apoyar el sector, ha dicho Tejerina, que ha defendido los esfuerzos «muy importantes» del Gobierno para apoyar al sector, incluida la ayuda directa de «hasta 300 euros por vaca» para las explotaciones por debajo del umbral de rentabilidad o «la moratoria en los pagos de crédito que tienen las explotaciones con el Ministerio». «Pero la Comisión también tiene capacidad de actuación para regular un mercado europeo y le corresponde a la Comisión regular este mercado y eso es lo que yo hoy le pido», ha apostillado.

Anticipos

Respecto a los anticipos de ayuda, la ministra ha garantizado que «el Ministerio tendrá todo preparado para que, a partir del día 16 de octubre, en el cual se abre el presupuesto comunitario» puedan darse «si las Comunidades Autónomas están en disposición de pagar», que actualmente se sitúa en el 50%. «Vamos a solicitar que se incremente este porcentaje. A ver cuál es el margen de maniobra que aquí nos da la Comisión», ha precisado. La ministra de Agricultura ha vuelto a insistir en que «todo el mundo se sume al esfuerzo del Gobierno» en apoyo del sector para «llegar a un acuerdo de mejores prácticas comerciales».

«Le pedimos al sistema de distribución que cambie algunas prácticas que están perjudicando al sector, le pedimos a la industria que en los contratos garantice una estabilidad en cuanto a la cantidad y precios de recogida a ganadores, a las cooperativas, que sigan el proceso de integración», ha explicado, al tiempo que ha considerado que la fusión entre la cooperativa láctea Capsa y Celta para «comercializar en conjunto la marca de distribuidor» constituye «un paso muy importante» y «una muy buena noticia».