José Luis Suevos - Ganando barlovento

El himno y la bandera

Es vergonzoso que cuando se juega una final de la Copa del Rey se pite al himno y al Rey

José Luis Suevos
Madrid Actualizado: Guardar
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Ninguno de los deportes que se practican en España están tan politizados como lo está el fútbol. Acaba de jugarse la final de la Copa del Rey de baloncesto entre el Real Madrid y el Valencia y el público se ha comportado con una gran corrección. Cuando juega cualquier tenista ondean banderas españolas. El caso de los «Hispanos» y las «Guerreras» en balonmano son un ejemplo para cualquier joven. En nuestro deporte, la vela, cuando se gana una medalla se acompaña con la bandera española. Véase el Oro de Londres 2012 de Marina Alabau en la que todo el equipo la trasladó como a una «diosa» portando la bandera española encima de su tabla.

«Tampoco he visto nunca a esos jugadores internacionales que se forran jugando en la selección pedir un poco de cordura a sus aficiones e intentar apaciguar los ánimos haciendo ver que el fútbol debe salir de la política y quedarse en lo exclusivamente deportivo»
José Luis Suevos

Hay miles de ejemplos que podría estar enumerando hasta mañana, pero llegamos al fútbol y la cosa cambia. ¿Por qué? Es verdaderamente vergonzoso que cuando se juega una final de la Copa del Rey entre dos equipos de regiones de España donde ser separatista está de moda, se pite al himno nacional y al Rey. Es paradójico porque esos aficionados que hacen eso bien que luego se van a celebrar el título y se bañan en las fuentes. Si no les gusta nuestro Rey, ¿por qué permiten que su equipo juegue la Copa? En ese caso sería más lógico renunciar a jugarla y pedir permiso a Francia para jugar la Copa de la República.

El estadio Vicente Calderón se despide del fútbol español albergando la final de la Copa del Rey entre el Barcelona y el Alavés, dos equipos que han jugado un gran campeonato, pero que sus aficionados llegan a Madrid, para ser recibidos por el Rey Felipe, con muchos ánimos de montar una gran pitada, tanto al monarca como al himno. ¿Quién puede arreglar esto? Año tras año sigue ocurriendo semejante tropelía y no la Federación Española, propietaria de la competición, ni el Consejo Superior de Deportes, ni el Gobierno de España toman ninguna medida. Lo máximo que hacen es multar a los clubes con una insignificante suma.

Este año se estrenan en el cargo para esta final, el Secretario de Estado para el Deporte, José Ramón Lete y el Ministro del Interior Juan Ignacio Zoilo. ¿Pondrá alguno de los dos el dedo en la llaga en caso de que haya altercados de este tipo en el Vicente Calderón? Sería interesante que lo hicieran. Tampoco he visto nunca a esos jugadores internacionales de estos equipos que se forran jugando en la selección pedir un poco de cordura a sus aficiones e intentar apaciguar los ánimos haciendo ver que el fútbol debe salir de la política y quedarse en lo exclusivamente deportivo. Zoilo y Lete tienen la palabra.

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