En busca de prácticas de mar

Ya hace casi un año que sigo las andanzas de una persona de mar de las que es complicado encontrarse. Una persona con mucho conocimiento, pasión y bastante mano izquierda. 

Se llama Antonio M. Padrón y Santiago y es el Capitán Marítimo de Tenerife desde hace más de una década. Desde finales del 2015 es embajador de la OMI (Organización Marítima Internacional), siendo el primer español en ostentar este cargo. 

En Tenerife es una persona querida y respetada por los buenos profesionales del mar. Leyendo sus últimas crónicas he encontrado datos que realmente me han llamado la atención y que cómo mínimo, creo se deberían conocer. Entre ellos revela que desde estos momentos hasta el año 2030 se necesitarán formar alrededor de 40.000 oficiales al año para dar cabida a las necesidades de la flota internacional de la marina mercante.

No podemos olvidar que el 90% del transporte mundial se realizar en barcos.

Junto con estos datos Padrón pone encima de la mesa un problema que sufren los alumnos de Nautica en España al no disponer de plazas en buques para realizar sus prácticas obligatorias después de terminar su formación en tierra. 

Cuanto menos, el análisis de estos datos te llevan a pensar que es sorprendente lo que está ocurriendo. Además, el Capitán Marítimo de Tenerife subraya que si no se reacciona a tiempo en el sector, esta profesión se verá abocada a la desaparición en España, aún siendo, como informa la OMI y la UE, una trabajo con alta demanda a nivel internacional, por lo menos, en los próximos quince años. 

Con la firme determinación de un marino y con el apoyo de la Dirección General de la Marina Mercante, Padrón está intentando poner remedio y lanzar un cabo a los nuevos marinos mercantes españoles poniendo en marcha lo que ha denominado el “Programa Embarque”. 

Un programa que está generando una base de datos con los Alumnos de Náutica, a través de los institutos, escuelas y facultades de náutica,  que están pendientes de cumplir con estas prácticas obligatorias en el mar con las navieras, empresas marítimas y las agencias de buques y/o embarques para facilitar los escenarios necesarios para coordinar el mayor número de prácticas posibles. 

El sector marítimo europeo lleva años trabajando por la “Economía Azul” desde el punto de vista social, económico y profesional, y Antonio M. Padrón y Santiago está obsesionado en que no perdamos este barco y que más se unan a la causa.