Final Champions
El coleccionista de finales del Real Madrid
Este seguidor blanco ha presenciado en directo todas los títulos madridistas desde 1998
Al día siguiente de que el Real Madrid se metiera en la final de la Champions de 1998, David Caballos se fue a la puerta del Bernabéu . Hacía 17 años que el conjunto blanco no jugaba una final, y habían pasado 32 desde el último título, así que tenía claro que él tenía que estar en Amsterdam como fuera. «Aún no me explico cómo conseguí esa entrada. Entonces, no había ni sorteos ni Internet. El club no estaba acostumbrado a gestionar una demanda tan grande, así que me planté en la puerta del estadio y allí había un grupo de gente tomando nota a los nombres y pidiendo el teléfono . Me apunté sin mucha esperanza, pero a los pocos días me llamaron para decirme que tenía una entrada», recuerda para ABC este seguidor blanco, que en Kiev verá su séptima final de Champions consecutiva . Todas a las que ha llegado el Real Madrid en estos veinte años de alegría continuada para el club.
Aquella final ante la Juventus fue el inicio de un periplo sin fin que le ha llevado a seguir al Real Madrid por medio mundo. El germen lo plantó su padre en 1989, en un regalo que llevó a ambos hasta Milán para ver a la Quinta del Buitre . «Perdimos 2-0, pero para mí fue muy especial, porque descubrí una forma distinta de conocer mundo, disfrutando de mi equipo», recuerda. Desde entonces, ha acudido a alrededor de cien partidos fuera de España, visitando países que nunca hubiera imaginado conocer si no hubiera sido por «su» Madrid. « Allá donde vamos -porque David siempre encuentra a alguien con el que ir a estos viajes-, nos gusta ser partícipes de su cultura. Por eso, lucimos turbante cuando fuimos a Abu Dabi o hachimaki en Japón. Además solemos hacer camisetas con la bandera de España y el país de destino, que a veces tenemos que regalar, porque siempre encontramos madridistas allá donde vamos», explica.
En estos 20 años, David ha viajado a decenas de países por Europa , Asia y África siguiendo al Madrid. « No llevo la cuenta, pero alrededor de cien partidos en sitios de lo más dispar . Desde Japón, a Marruecos, pasando por Abu Dabi, Escocia, Noruega, Alemania... «De todos los países guardo un buen recuerdo, porque todos tienen rincones que conocer más allá del partido, que es lo importante, pero no lo único que me mueve a realizar cada desplazamiento», señala este seguidor, socio del Real Madrid desde 1987. Desde aquella final de Amsterdam hasta hoy, Caballos ha realizado casi todos los viajes con el Real Madrid fuera de España desde octavos. Los que se ha perdido, que pueden contarse con los dedos de las manos, ha sido «por causas de fuerza mayor».
Anécdotas hay muchas, pero si tiene que hablar de un viaje rocambolesco fue el que realizó hace un año a Macedonia para presenciar la Supercopa de Europa. «Había quedado allí con un amigo, pero el desplazamiento desde Madrid lo realicé solo y llegar hasta Skopje fue una odisea . Nada más llegar me di cuenta de que Macedonia no era un país preparado para un evento tan grande y estaba todo un poco desbordado. Aun así, disfruté mucho con la victoria y también conociendo una cultura tan diferente», reconoce Caballos, médico del Samur-Protección Civil. De hecho, su trabajo le permite disfrutar del tiempo necesario para poder hacer estos viajes. «De otra forma, sería imposible. Aunque tiene muchos recuerdos de cada uno de esos partidos, hay uno que no falla nunca . «Colecciono banderines de equipos. Tengo alrededor de 500, así que encontrar uno del equipo local es uno de mis objetivos en cada viaje que hago siguiendo al Real Madrid», señala. Porque David, además de madridista, es un enamorado del fútbol -fue a la Eurocopa 2008- y del deporte en general -le encanta el balonmano y estuvo en el pasado Europeo siguiendo a la selección -. Un coleccionista de finales, que en Kiev espera ver a su Madrid levantando, una vez más, la Copa de Europa. La décimo tercera. Un sueño que cuando se acercó al Bernabéu en aquel mes de mayo de 1998 no imaginaba que fuera a vivir tan de cerca.
