La «inhabitable» Villa Olímpica

Las condiciones de alojamiento de los atletas de todo el mundo en la Villa Olímpica de Río están generando no pocos quebraderos de cabezaal Comité Olímpico Internacional y al Ayuntamiento de la ciudad. Varias delegaciones se han pronunciado públicamente sobre las condiciones de higiene y el mal acabado de las instalacionesque deberán acoger a todos los equipos durante los Juegos Olímpicos que comienzan en apenas diez días.

El primero en quejarse fue el Comité Olímpico de Australia, que se negó a entrar en la Villa Olímpica el pasado domingo alegando que el lugar es «inhabitable». La delegación del país abandonó el lugar para hospedarse en hoteles y emitió un comunicado en el que enumeraba los trastornos: «En los edificios huele a gas, hay fugas de agua y defectos en la electricidad».

La delegación dio tres días de plazo para que los defectos sean solucionados.

Algo parecido ocurrió en el edificio que alberga la delegación de México, lleno de humedades en los techos de los apartamentos y con los desagües obstruidos. Los italianos ya han contratado electricistas, albañiles y fontaneros para resolver problemas en las instalaciones que ocupan en la Villa Olímpica.

Según el jefe de la delegación italiana, Carlo Mornati, los atletas han encontrado una situación de «caos», por lo que también decidieron alojarse en un condominio cercano hasta que se subsane la situación.

En el caso de Angola, la queja es que las condiciones de alojamiento son muy inferiores a las de Londres y Pekín. Los jugadores de su equipo de balonmano están descontentos porque no tienen ni televisión en las habitaciones. Estas carencias son consecuencia de la reducción del gasto promovida por el Comité Río 2016 desde finales del año pasado. Esta decisión afectó directamente al número de televisores disponibles para los atletas en la Villa Olímpica.

Por su parte, los holandeses decidieron directamente comprar en un supermercado las alfombras de baño que habían echado en falta en sus apartamentos. Cinco miembros de la delegación entraron con un cargamento de alfombras y de productos de limpieza.

La alcaldesa de la Villa Olímpica, la exjugadora de baloncesto y medallista Janeth Arcain prometió solventar la situación «en 48 horas», mientras el alcalde de Río, Eduardo Paes, consideró normal tener que realizar ajustesa última hora en vista de la gran cantidad de visitantes.

Paes asegura que los brasileños son grandes anfitriones, e incluso se permitió hacer una broma con las quejas de los australianos, a los que ofreció poner un canguro en la puerta del edificio para tratar de atraerles de nuevo a su alojamiento. El síndico de la Villa Olímpica, Mario Cilenti, será destituido por los problemas estructurales en el alojamiento de los atletas.

La Villa Olímpica fue inaugurada el pasado domingo. Construida en el oeste de la ciudad de Río de Janeiro, tiene 31 edificios y 3.604 apartamentos. El complejo fue promovido por un grupo de empresas privadas con una inversión de 728 millones de euros de la Caixa Económica Federal. Se estima que después de los Juegos se venderán por 900 millones de euros.