Barcelona, de la depresión a soñar con el liderato

Parecía desahuciado el Barcelona hace una semana cuando una goleada ante el PSG y una victoria in extremis ante el Leganés que provocaba los pitos del Camp Nou, les apeaba de casi todas las apuestas para ganar Champions y Liga. Pero el tropiezo del Real Madrid en Mestalla el pasado miércoles ha levantado los ánimos de los culés y les ha hecho creer de nuevo en sus posibilidades. Todo dependerá de que lo refrenden esta tarde en el Vicente Calderón.

Y de estar prácticamente muertos, desanimados y sin opciones, aterrizan en Madrid con opciones de ponerse líderes momentáneos a la espera de que los de Zinedine Zidane solucionen su papeleta ante el Villarreal. Los azulgranas creen que si los blancos sienten el aliento culé en el cogote en el Madrigal el escenario de hace una semana puede dar un vuelco inesperado.

Y aquí es donde entra el factor Luis Enrique y el instinto de Messi, una dupla que le tiene bien tomada la medida al Atlético de Simeone. El técnico es poco amante de las estadísticas, pero los números dicen que el asturiano nunca ha perdido en Liga ante los colchoneros. Además, el Barcelona suma seis visitas ligueras seguidas sin caer. Pitado en el Camp Nou, Luis Enrique ha preparado el partido a conciencia. Ha intensificado las reuniones con sus jugadores y ha insistido en subsanar el talón de Aquiles del juego azulgrana que, además, es uno de los puntos fuertes del Atlético: la presión en la salida del balón, cómo ejercerla y cómo superarla.

Messi por su parte, se frota las manos. Esta tarde se mide a una de sus víctimas favoritas. El argentino le ha anotado 26 goles en 33 partidos. Sólo el Sevilla ha encajado más goles (27). La Pulga se motiva especialmente cuando juega contra los colchoneros, a los que ya les ha hecho tres tripletes y cuya media en Liga es de gol por encuentro: 21 tantos en 21 choques.

Josep Maria Bartomeu resumió lo que significa el choque de esta tarde para el Barcelona. «Es un partido muy importante. Nos jugamos seguir luchando por esta Liga, un título que es la ambición número uno del Barça cada año. Estamos cerca, ahora a un punto. El Barça tiene la oportunidad de dar un golpe en la mesa y de volver a decir que esta Liga la queremos, la ambicionamos y que el socio, que últimamente ha sufrido una cierta intranquilidad, vea que esto continúa», explicó desde Hong Kong.