Fernández, la llave de Pina para regresar al Cádiz CF

La escenificación de Rafael Fernández Bernal como nuevo accionista del Cádiz CF ha dejado a las claras que llega con fuerza al club del que tanto amor profesa. Empresario gaditano, ahí está precisamente su carta de presentación, una partida de nacimiento y unos colores que ha mamado desde pequeño. Algo que mucha parte del cadismo demandaba desde hace años, que alguien de la tierra entrara y tuviera poder en el club amarillo.

Su llegada al Cádiz CF no es ni mucho menos casual. Quizás si responde a una gran ambigüedad al intentar vender que llega como conciliador de ambas partes, la de Manolo Vizcaíno que tiene cogido el toro por los cuernos, y otra, la de Quique Pina, en la puerta del club pero sin poder entrar.

Dicha ambigüedad es algo que el propio propietario del casi el 21% de las acciones del Cádiz CF ha intentado disipar con su presentación en el Ramón de Carranza. “Entiendo que se me pueda ver así pero yo vengo como cadista para intentar reconducir el proyecto, lo mejor es que siga Vizcaíno y regrese Jorge Cordero”.

El papel que él mismo se encomienda a partir de ahora no es nada fácil, ya que conciliar a dos titanes que están ahora mismo a años luz de entenderse es casi una quimera. De ahí que de nuevo llama poderosamente la atención que venga con ese propósito utópico cuando ni él mismo nombra a Quique Pina en su presentación. Si lo hace con David Buitrago al que se refiere en un par de ocasiones y con el que él mismo apunta que ha tenido “contactos para comprarle sus acciones”.

De ahí que más allá del papel de conciliador que Fernández trata de vender, quede patente que su labor de pacificador en el Cádiz CF puede volver a darle la llave del club a Quique Pina, a la espera de recuperar el poder perdido y sabedor que el papel de administrador único que posee Vizcaíno, le da mucho más poder en plaza al sevillano.

¿Futuro presidente del Cádiz CF?

Está por ver ahora como evolucionará la relación de Rafael Fernández con el propio Manuel Vizcaíno. Éste último le pidió al primero ser consejero del Cádiz CF hace unos meses, cuando todavía la guerra no era tan evidente. El gaditano lo rechazó, y lo hará de nuevo si hace falta, dejando claro, de esta forma, que su papel y rol está más cerca de Granada que de Sevilla. De no ser así, la tarea sería clara. Entrar en el accionariado del Cádiz CF y apoyar al actual presidente. No ha sido así, Fernández ha optado por mediar con la idea de que Pina y Cordero regresen al Cádiz. Esa postura le delata.

La ampliación de capital propuesta por Vizcaíno le ha cogido con el paso cambiado, no le ha gustado un pelo que su ‘amigo’ responda de esa forma a su entrada como accionista. Cierto es que tampoco le ha gustado a Vizcaíno esto último, el sevillano no esperaba que su ‘amigo’ se hiciera con una quinta parte del Cádiz CF.

Y a todo esto queda por ver como evoluciona la situación y si hay entendimiento, algo que a día de hoy parece impensable. Sin afirmar rotundamente, Fernández incluso ha dejado caer que no le importaría ser presidente del Cádiz CF si todo llega a buen puerto. “Si las dos partes me lo pidieran lo sería”, ha explicado él mismo.

Solo el tiempo dirá si el papel de Fernández es determinante o no. Ha entrado con fuerza, tiene ganas e ilusión. Pero en esta partida de ajedrez siempre hay bandos por más que se quiera recalcar lo contrario. No hay ambigüedades posibles. Otra cosa es que cada uno acepte su rol, se baje del burro y si le ve las orejas al lobo ceda. En medio, el Cádiz CF, no es cualquier cosa, más aún en plena temporada y con un ascenso que se puede tambalear más o menos si la guerra continúa.

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