Los clubes modestos ya sueñan con la ACB

La canasta nacional vive estos días pendiente de la decisión que debe adoptar la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la supresión del canon de entrada a la ACB. De lo que se decida en ese despacho depende buena parte del futuro de una docena de clubes españoles. Modestos que sueñan con jugar alguna vez en la Liga Endesa y cuyas aspiraciones estarían más cerca de hacerse realidad si se confirman los augurios de las últimas horas, que apuntan a la supresión de ese canon.

Aunque por el momento no hay resolución oficial, todo apunta a que la CNMC abolirá ese canon de entrada y dará vía libre a los ascensos en la ACB. Así lo confirman a ABC fuentes próximas al organismo, que aún se tomará unos días para redactar el informe final.

Ni la ACB, ni la Federación Española, ni el CSD –las partes implicadas en el conflicto– moverán ficha hasta que el expediente esté resuelto, aunque de puertas para dentro los tres están calibrando las consecuencias de la decisión. La ACB, por ejemplo, estudia ya las opciones para ampliar la liga a 18 equipos sin que eso suponga un aumento de fechas, para lo que plantea eliminar los playoffs o resolver el título con una «Final Four»al estilo Euroliga.

Esos movimientos y la cercana resolución de la CNMC –no se hará oficial al menos hasta Semana Santa según ha podido confirmar ABC– ha puesto en guardia a los equipos más modestos. Esos que luchan cada jornada en la LEB Oro por conseguir un ascenso que luego se trunca en los despachos por falta de liquidez. Entre ellos, Melilla Baloncesto y el Quesos Cerrato Palencia siguen con especial atención la actualidad del asunto, pues ambos alcanzaron con la ACBun acuerdo para aplazar su ascenso a la espera de lo que dictamine la CNMC. «Si se confirma, se nos abrirían mucho las puertas para un posible ascenso. Sabemos que la línea del Gobierno es abolir ese canon anacrónico, pero mientras no haya una resolución oficial no podemos hacer más que esperar», afirma a ABC Gonzalo Ibáñez, presidente del club palentino.

En esa espera, ellos se han reunido en las últimas semanas con todas las partes para conocer de primera mano cómo se podría articular su ascenso. Así es como han conocido que José Ramón Lete –presidente del Consejo Superior de Deportes y exjugador de baloncesto– estaba muy pendiente de este problema que envuelve a decenas de ciudades y miles de aficionados. Porque la «fosilización»de la ACB la ha convertido en los últimos años en una liga prácticamente cerrada con ascensos y descensos contados con los dedos de una mano.

Difícil solución

A pesar de la más que probable anulación del canon –que asciende a casi 4 millones de euros–, el camino para hacer realidad las ilusiones de los más modestos es espinoso. «No creo que vaya a ser algo inminente. Aunque la CNMC decida que abolir el canon, aún habría que ver cómo la ACB, la Federación y el CSD articulan la situación para que suban los que se lo ganen en la cancha este año y los que tenemos adquirido el derecho del año pasado», señala a ABC Enrique Suárez, gerente del Melilla Baloncesto, que anticipa un terremoto que removerá los cimientos de la liga, cuyo formato variará para hacer hueco a los modestos.