El mayor reto del fútbol sala español

Entraba dentro de lo posible, pero el golpe que recibió la selección española de fútbol sala en el Europeo de hace dos años en Bélgica resultó muy duro. Con la Liga más potente y acostumbrada a marcar el paso en las competiciones internacionales, con cuatro Europeos consecutivos entre otros grandes logros, España se vio apartada de la última final por Rusia, que caería después ante una sorprendente Italia. Desde entonces, los de José Venancio han estado rumiando aquella decepción y deseando que llegase este día, el del inicio de un nuevo Europeo que les permitiese recuperar su hegemonía.

Esa fecha ha llegado. Desde hoy, y hasta el 13 de febrero, Belgrado ofrece a la hexacampeona de Europa esa oportunidad, si bien la mala fortuna ha querido que tenga que afrontar el complicado reto sin algunas de sus mejores armas. Sergio Lozano y Aicardo, dos pilares de la selección, cayeron lesionados antes de la última concentración y ya en Las Rozas se les unieron Adri y Fernandao.

Cuatro especialistas cuya ausencia reduce las alternativas del equipo, como reconoce Miguel Sayago «Miguelín», jugador de ElPozo Murcia sobre el que recaerán buen parte de las opciones de ataque españolas. «Estamos hablando de Sergio, con su potencia e intensidad defensiva, o Aicardo con su potente disparo. Todas son bajas importantes, no seremos tan tontos de negarlo, pero los que han venido a sustituirles están capacitados para hacer una gran labor. Además nosotros no dependemos de un solo jugador sino del grupo entero», explica a ABC.

Talento al servicio del grupo

Esa es la mejor noticia para España en medio de tanta contrariedad, pues su fuerte ha sido tradicionalmente saber poner el talento individual al servicio del equipo, como señala Paco Sedano, portero del Barcelona Lassa. «Todos los equipos notarían estas bajas –afirma–, pero esta es una selección que lleva manejando un grupo de veinticinco jugadores desde hace años. Aquí la clave es que nadie está por encima de nadie, somos un grupo en el que todos aportan lo mismo y todos rinden bien».

España debuta esta noche (21.00 horas, Mega/Eurosport) ante Hungría, una selección dirigida por el técnico español Sito Rivera. Un choque accesible al que seguirá un duelo con la rocosa Ucrania el próximo sábado (18.30 horas). Pero lo duro de verdad llegaría en los cuartos de final, donde España podría cruzarse con la anfitriona Serbia o con la Portugal de Ricardinho, estrella del Movistar Inter y mejor jugador del mundo. Los lusos, junto a Rusia, tradicional rival de España y su último verdugo, e Italia, vigente campeona del torneo, son los principales candidatos al título.

Sin embargo, Sedano, como muchos de sus compañeros, asegura que el equipo está centrado solo en la fase de grupos: «Estamos pensando en Hungría y Ucrania que son los dos próximos rivales. Los favoritos, junto a nosotros, son Portugal, Italia y Rusia, eso lo sabemos todos, pero hay que ir paso a paso». «Yo personalmente no sé ni quién nos toca en los cruces, ya lo iremos viendo. Está claro que hay que estar un poco pendientes de los demás rivales, pero para eso ya está el cuerpo técnico. Los jugadores tenemos que pensar en entrenarnos bien y hacer bien las cosas», añade.

«Va a ser muy complicado, muy competido, porque las selecciones han avanzado a un nivel grandioso, pero nos debemos fijar en nosotros, cuando toquen los cuartos pasar los cuartos, pasito a pasito, luego la semifinal y si Dios quiere la final y lo que todos estamos deseando, conseguir este título», sentencia Miguelín antes de iniciar la reconquista.