Quintana siembra emoción antes de Alpe D'Huez

Nairo Quintana demostró por fin que es el mejor escalador del mundo e hizo sufrir a Chris Froome en la subida a La Toussuire. El líder no entró en crisis, perdió medio minuto y sigue disfrutando de una ventaja interesante de cara a la traca final de mañana, con final en Alpe D'Huez, pero mostró debilidad y Movistar tratará de ponerle contra las cuerdas.

[Así hemos contado la etapa]

Desnudado el Sky en la ascensión al imponente Croix de Fer, donde el Astana «mató» a los lugartenientes de Froome, Richie Porte y Geraint Thomas, el líder solo contó con la ayuda de Wout Poels para tratar de minimizar los ataques. No pudo controlar a Nibali, el más alejado de él en la general, que hizo su apuesta.

Resultó conmovedor el esfuerzo del italiano, ganador de las tres grandes y derrotado en este Tour en el que defendía su corona. Atrapó el triunfo en la etapa y es cuarto en la general.

La etapa reina de los Alpes tuvo un arranque trepidante. De buenas a primeras el pelotón se topó con el Col de Chaussy, donde ya se movieron Contador, Nibali y Valverde, que cogieron unos segundos de ventaja y fueron neutralizados en la cima. Por delante, «Purito» Rodríguez, infiltrado en la escapada del día, sumó puntos para el maillot de la montaña. Pero ahí acabó su cosecha, y tendrá que seguir porfiando mañana, porque Bardet acabó arrebatándoselo. Pierre Rolland saltó del grupo de fugados en la ascensión a la Croix de Fer y abrió camino.

Pero la gran batalla se desató por detrás, con un arreón de orgullo de Nibali, que por fin pudo despegarse de Froome. El líder sufrió un problema mecánico y tuvo que echar pie a tierra. Se recuperó y contactó con sus rivales, pero Nibali llegó a la cima del puerto con ánimo de seguir haciendo daño. Alcanzó a Rolland nada más coronar el Col du Mollard, de 2ª categoría, y los dos juntos afrontaron la ascensión a La Toussuire con casi dos minutos sobre el grupo del líder.

Fundido por el esfuerzo, no pudo Rolland soportar el ritmo de Nibali, que enfiló hacia el triunfo de etapa. Majka tomó la responsabilidad de tirar del grupo del líder para tratar de defender la posisicón de Contador en la general, algo que no consiguió. Entonces demarró Quintana para mostrar por fin a un Froome humano. El británico tiene margen (2:38), pero seguro que también algunas dudas.