Nerea Pena: «Vamos a salir a matar»

La aparatosa rodillera que luce en cada encuentro es más un seguro psicológico que físico; un recuerdo palpable de que las lesiones aparecen en el peor momento. A Nerea Pena (Pamplona, 1989) le llegó a las puertas de los Juegos de Londres 2012. Una espina muy profunda de la que prefiere no hablar más que en la pista. «El oro europeo es una plaza directa a Río 2016. Lo voy a dar todo ante Noruega», advierte para ABC igual de rápida que sus lanzamientos, que han sido imprescindibles para que la selección española haya llegado al último día de torneo.

-¿Soñaba con este momento?-Seré sincera. No me conformaba con nada, pero sabíamos nuestras limitaciones. Nos costó mucho adaptarnos las unas a las otras.

-¿Demasiados tipos de balonmano en un mismo vestuario?-Tenemos un estilo parecido, pero con manías diferentes y cuesta. Lo bueno es que todas teníamos el objetivo muy claro: conseguir lo máximo posible.

-Les junta Jorge Dueñas y... ¿magia?-Eso parece, sí, pero detrás de esa magia hay muchísimo trabajo y dos semanas de preparación exhaustiva con entrenamientos muy buenos desde el primer día. Y muchísima ilusión.

-¿Qué tiene la camiseta nacional para que se estén jugando el oro con ligas tan potentes como la noruega?-Hay que matizar: por desgracia, la liga nacional ha bajado el nivel, pero las jugadoras estamos en lo más alto. Lo que no podemos es sobrevivir con la infraestructura actual. Me da mucha pena, pero tuve que marcharme a Budapest si quería vivir del balonmano.

-¿Cómo se vive allí?-Yo me he adaptado muy bien. Es otro mundo. La afición defiende a su club en las buenas y las malas. Más que un deporte, es un sentimiento.

-¿Volvería a España si pudiera?-Claro, y ojalá lo hagamos algún día. Ahora mismo tienen que cambiar muchas cosas, pero creo que si seguimos haciendo grandes cosas con la selección llegará un momento en el que volveremos. En este Europeo nos estamos jugando mucho, todo lo que logremos repercutirá en el futuro. Y si aumenta el nivel de la liga nacional, también lo hará la selección.

-¿Notan el apoyo que suscitan?-Jugamos por nosotras, pero también por hacer disfrutar a la gente, para que se enganchen al balonmano. Ante Noruega necesitamos que todos estén apoyándonos. Va a ser un partidazo.

-¿Han reflexionado sobre las segundas partes, como ante Rumanía o ante Montenegro?-Mucho. Teníamos controlada la semifinal ante Montenegro, pero nos volvimos a atascar. Lo importante es que supimos sacarlo adelante y que alcanzamos la final.

-¿Supo a revancha la victoria sobre las montenegrinas?-Fue una satisfacción después de que nos dejara sin final en Londres, pero sobre todo por nosotras. Lo merecíamos.

-Está en la final del Europeo, ¿qué daría por el oro?-Menos la salud, podría ofrecerte todo lo que quisieras. El oro sería... no sé explicarte. Es el oro, pero también es la plaza para los Juegos, que los tengo clavados. Ojalá... No, ojalá no. ¡Vamos a salir a matar!