Madrid se pone flamenco y monumental

«Viva Madrid, que es la corte…», reza la letra de la malagueña, cuya verdad hoy nadie discute en el flamenco. «Gracias a Madrid este arte se hizo profesional. Todos los grandes se han dado a conocer en esta ciudad», comenta Juan Verdú, director de Flamenco Monumental.

Cuando a Verdú le notificaron que dejaba de ser director del Suma Flamenca de la Comunidad de Madrid decidió que había que seguir apostando por las programaciones de cante, toque y baile y empezar una nueva etapa. «Estoy cansado de ser público. Ahora quiero ser privado. Me encanta este nuevo reto», señala. Para empezar, nada de cuevas ni cuartos de cabales: un teatro, el Monumental, con sus 1200 butacas.

Para llenarlo, dos carteles que apuestan por la veteranía de figuras como Carmen Linares, José Mercé y Gerardo Núñez; por artistas más jóvenes como Arcángel, Rocío Márquez o La Moneta, así como por propuestas menos convencionales, pero igual de contrastadas, como las de Martirio, Juan Valderrama y el trío de Jorge Pardo, Carles Benavent y Tino di Geraldo. «Yo soy como Del Bosque y he escogido a los mejores aunque alguno se me ha escapado por estar resfriado o andar por Brasil. Con este equipo ganamos la Eurocopa y la Champions», comenta Verdú.

Para José Mercé, «Madrid tiene que seguir siendo la capital del flamenco. A veces algunos puristas me han dado palos por decir en el escenario que Madrid es la capital del flamenco, algo que no entiendo. Yo he tenido la gran suerte de haber vivido la época más grandiosa que ha tenido el flamenco, que fue en los años 70 aquí». El guitarrista Gerardo Núñez, por su parte, recuerda las oportunidades que se le presentaron desde que hace veinte años llegara a la capital: «Una noche Enrique Morente me escuchó tocar en el Candelas y a la semana siguiente estaba actuando en el Teatro Real», señala.

Diana Zaforteza, directora adjunta del festival, suma al proyecto su experiencia como editora literaria, «por la necesidad de difundir el flamenco entre la gente joven». Para Zaforteza, Madrid tiene cubierta la programación en los tablaos, pero «flojea en los teatros. Es más fácil ver flamenco en un gran teatro en el extranjero que en España», asegura. La dupla de Verdú y Zaforteza anuncian para marzo Flamenco en el Ruedo y Territorio Flamenco, dos nuevas programaciones enfocadas al público joven y a los extranjeros. «A los turistas no se les puede tratar como se les trata, con una paella, una bailaora y para casa. Tenemos que enseñarles los barrios, que participen en escuelas de baile y de cajón para que se hagan flamencos y vuelvan», concluye Verdú.

Mercé se pasa al pop

José Mercé hará, para cantar en el Festival Flamenco Monumental, una pausa en la grabación de su nuevo disco, un disco que esta vez no tendrá seguiriyas, bulerías o cantiñas. «Ahora voy a hacer un disco de pop. No es broma. Me queda un disco con Warner, no quisieron un disco de flamenco y la única forma de adquirir la carta de libertad es haciendo el disco de duetos que me propusieron», comenta a ABC. Eso sí, el nivel de los compañeros es difícil de superar. Desde Alejandro Sanz a Andrés Calamaro, pasando por Ainhoa Arteta, Pablo Alborán o Jorge Dréxler. «Más allá de la carta de libertad es una buena ocasión para juntarte con artistas de nivel. El disco está muy bonito y, lógicamente, yo voy a sonar flamenco siempre», apostilla.

El nuevo trabajo que saldrá a principios del año que viene, no desplaza al gran proyecto con el que el jerezano lleva lidiando mucho tiempo, su Antología del Cante. Para Mercé se trata de «está muy adelantada y ya es mía. Yo con ese trabajo me quedo muy tranquilo porque es algo muy personal, es una obligación que tengo, porque viniendo de donde vengo y de la familia que vengo tengo la obligación de hacerlo», señala. Para Mercé ya ha habido antologías didácticas, «yo quiero abarcar todos los palos que yo pueda. Voy a cantar flamenco; como decía Agujetas, la verdad del flamenco», sentencia.