Elvis Presley: Las grabaciones de 1953-1955, el comienzo de todo

Cuatro canciones grabadas en sus inicios se incluyen en la recopilación de su obra temprana «A Boy From Tupelo-The Complete 1953-1955 Recordings»

Muestra de la carátula de «A Boy From Tupelo-The Complete 1953-1955 Recordings» ABC
Nacho Serrano

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El chico de Tupelo siempre creyó en sí mismo . Por eso, en julio de 1953 se acercó a los estudios de Sun Records en Memphis y pagó de su propio bolsillo la sesión de la que surgió su primer disco de acetato. Volvió seis meses después, el 4 de enero de 1954, para grabar otros dos temas y, de paso, ver si la discográfica finalmente se interesaba por él, cosa que por supuesto ocurrió.

Aquellas cuatro canciones («My Happiness»/«That’s When Your Heartaches Begin» y «I’ll Never Stand in Your Way»/«It Wouldn’t Be the Same (Without You)») son uno de los muchos tesoros que se pueden encontrar en «A Boy From Tupelo-The Complete 1953-1955 Recordings», la colección más completa que reúne las primeras grabaciones de Elvis –muchas inéditas hasta ahora– además de la interpretación en directo recientemente descubierta de «I Forgot To Remember To Forget» (grabada en el Louisiana Hayride de Shreveport el 29 de octubre de 1955), que se publica aquí por primera vez de manera oficial.

Diario de viaje

Esta caja de tres cedés (también hay disponible una edición en vinilo) incluye un libro de 120 páginas cuyo formato de diario de viaje ilustrado facilita el relato de los comienzos de la carrera de Elvis, a través de hechos, anécdotas, recuerdos y una gran cantidad de fotos muy poco conocidas. En el primer disco están los masters originales de Sun Records; en el segundo, las tomas descartadas de aquellas sesiones y, en el tercero, todas las grabaciones en directo y para la radio de la época que se conservan. En total, «A Boy From Tupelo-The Complete 1953-55 Recordings» ha requerido más de 1.500 horas de trabajo de restauración y casi 200 horas de tiempo adicional de estudio dedicado a una minuciosa remasterización del material.

Esta colección, publicada el pasado 28 de julio, es el relato de cómo el joven Presley se preparó para el estrellato , una condición que alcanzó definitivamente al marcharse con la poderosa discográfica RCA, que adquirió el contrato con el artista por 40.000 dólares. Con esta multinacional firmó su primer gran éxito comercial, el sencillo «Heartbreak Hotel», el 27 de enero de 1956, y para el mes de marzo tenía su primer álbum en la calle, ya con el infame mánager Tom «Coronel» Parker a los mandos de la nave.

A partir de ahí Elvis comenzaría un frenético ritmo de grabaciones, publicando su segundo disco (titulado sencillamente «Elvis») en octubre de ese mismo año, y el tercero en julio de 1957 («Loving You»), manteniéndose en el número uno de las listas de ventas durante diez semanas.

La visión comercial de Parker gestó otro gran pelotazo en octubre, con el lanzamiento de un «Christmas Album» que vendió tres millones de copias aquellas Navidades (ahora supera los diez millones). El servicio militar interrumpió sus grabaciones hasta 1960 , cuando regresó con «Elvis is back!», álbum que inicia una segunda etapa discográfica llena de bandas sonoras, marcada por la obcecación del «Coronel»Parker por conquistar el mundo del cine.

La década de los setenta vio el resurgir de un Rey que combinó grabaciones de estudio como «Promised Land», de directo como el legendario «Aloha from Hawaii Via Satellite» y recopilaciones como «Elvis: A Legendary Performer», hasta su despedida con «Moody Blue», publicado un mes antes de su muerte.

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