Jesús Quintero y Félix Machuca, ayer en el Ateneo RAÚL DOBLADO
Jesús Quintero y Félix Machuca, ayer en el Ateneo RAÚL DOBLADO

«En Sevilla, Trajano tiene una calle, Adriano otra y se acabó»

Félix Machuca, con la complicidad de Jesús Quintero, presentó ayer en el Ateneo su novela «El sueño del búho»

SEVILLA Actualizado: Guardar
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Dos espectadores de excepción: los bustos de Trajano y Adriano, de Pérez Comendador, en un salón de actos del Ateneo lleno de público, de amigos y hasta de reyes magos de pasadas ediciones y de la próxima cabalgata de la institución, conformaron ayer un escenario más que propicio para la presentación de la última novela del periodista y columnista de ABC Félix Machuca.

Se presentaba «El sueño del búho» (Algaida) pero no a la habitual usanza, sino con la complicidad del periodista y presentador Jesús Quintero, con quien Machuca colaboró en «El loco de la colina», uno de sus más famosos programas. Micros dorados para recrear el ambiente de aquellas recordadas y mágicas entrevistas, un diálogo que transitó entre el humor, la seriedad, la anécdota, la trascendencia...

Y Quintero, una vez más, en su papel de entrevistador: «Sé ante quien estoy —confesó al auditorio— porque colaboramos en El loco de la colina y siempre pensaba en él buscando el chispazo, la originalidad y la rapidez». Tras traer a la memoria a Rodrigo Caro y a Itálica, interrogó al autor sobre la génesis de su novela. «Como título nació de una superstición romana de que soñar con búhos tiene muy mal bajío y el protagonista, que es un soldado auxiliar de las tropas de Trajano que viene de Dacia a Sevilla, sueña con búhos. La novela —prosiguió Machuca— nace de un empeño personal con Hispalis, de haber sido una de las ciudades más poderosas del Imperio y a la que nadie le había prestado atención como escenario literario». Pero existe una razón más: «El año que viene se cumplen 1.900 años de la muerte de Trajano y del ascenso al poder de Adriano. Dos andaluces, dos sevillanos, que van a mandar el imperio mayor del mundo, junto con el de China, y nos lo hemos pasado siempre por el arco del triunfo. Aquí, Trajano tiene una calle, Adriano otra y se acabó. El año que viene se va a hacer muy poquito al respecto», lamentó.

En la presentación, se reivindicó la figura de los dos emperadores y se recordó al Beni de Cádiz

La charla discurrió entre comentarios trufados de ironía e intencionalidad. «¿Cuál sería un mal sueño para los españoles?», preguntó Quintero enlazando con el título de la obra. «La agencia tributaria», respondió Machuca sin ambages, rotundo. Y, a continuación, nuevas reflexiones: Un poeta dijo que de todas las historias de la historia, la más triste es la de España... «Porque siempre acaba mal. Yo creía que una de las mejores páginas de nuestra historia ha sido la de los años de la democracia hasta que esta crisis nos ha matado», destacó el autor. «La palabra ruina me ha hecho recordar...», zanjaba más adelante Quintero con sorna.

Pero para retranca y humor, el de su añorado Beni de Cádiz, de quien se proyectó para regocijo de los presentes el fragmento de una entrevista suya con el artista gaditano en la que éste explicaba y razonaba sobre la civilización en la que le hubiera gustado vivir. La romana, sin lugar a dudas.

Y Cuba

Tras su eco, y por momentos, de vuelta al libro. ¿A quién se parece más a Trajano o a Adriano? «A mí me va más la calle Teodosio», apuntaba Machuca, quien se refirió también a la ampliación de fronteras que logró en su tiempo Trajano y al papel de Adriano, una «sucesión un tanto escabrosa» que da razón de ser a su novela, en una época en la que la Bética «movía el mundo. Tenía plata, sobre todo, y aceite. Hoy sería una región tan dinámica como Baviera», dijo.

La Biblia, el Quijote, el Archivo de Indias, Larra, Borges, Gala, Pérez Reverte... fueron otros argumentos y escritores que salieron a relucir en este diálogo en el que Quintero interpeló al autor, entre otras cosas, por Cuba, tierra a la que le unen vínculos familiares, y lo que está por llegar. «A Raúl Castro, le preguntaría que por qué le llaman la china y si va a durar mucho la transición», reveló Machuca, quien antes de terminar lanzaba una interrogante al presentador: «¿Tú vas a decir algo del libro?» «Es extraordinario. Siempre he tenido la curiosidad de conocer la vida cotidiana de los romanos. Yo —concluía Quintero— me casaría con Adriano».

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