Sara Baras: «No me lo creo, aún hay cosas de Paco de Lucía que no puedo escuchar»

Paco de Lucía, Camarón, Enrique Morente, Moraíto, Antonio Gades y Carmen Amaya. Sara Baras vuelve a revisar a los mitos (su último espectáculo fue 'Medusa, la guardiana'). A darle voz con su baile, con un montaje total. A gritar con el cuerpo, a contar y recordar. A mostrar. A ser Sara Baras de nuevo sobre un escenario. Porque 'Voces' son las de estos maestros, pero también lo que su influencia ha hecho de la bailaora gaditana y toda su compañía. Después de tres años sin pisar las tablas del coliseo gaditano, Baras vuelve al Falla para presentar este espectáculo que tan bien ha sido acogido en países como Francia o EEUU.

El guion, la dirección y coreografía de 'Voces' corren a cargo de Baras, que se ha hecho acompañar de nuevo por José Serrano como artista invitado y coreógrafo.

Junto a ellos, colaboraciones muy especiales como la de Keko Baldomero (música), Tere Torres y Javi Cosano (vestuario), Chaboli, Carlos Herrera o Sergio Monroy. La escenografía ha corrido a cargo de Ras Artesanos.

-Vuelve al Falla después de tres años, ¿está nerviosa?

-Estoy más contenta e ilusionada que otra cosa porque realmente 'Voces' ha tenido mucho éxito fuera de España. Normalmente, salvo 'La Pepa', hacemos la gira y al final nos vamos al Falla. Esta vez es al contrario, lo primero de Andalucía va a ser Cádiz.

-París, México, EEUU, ¿cómo ha sido la acogida de 'Voces'?

-Siempre hemos dicho que el flamenco es un arte que no necesita entenderse, sino sentirse. Se nota cuando sales fuera de España y compruebas la reacción del público. El recorrido ha sido muy especial, de París a México, Nueva York, Washington, Miami. Todo ha sido muy emocionante. No sólo por el espectáculo, sino porque está dedicado a los maestros y ver cómo la gente conocía, aplaudía y admiraba el trabajo de todos ellos supone una doble satisfacción.

-¿Cree que ha conseguido entonces rendir homenaje a esos maestros?

-Aunque suene raro, realmente 'Voces' nace de un momento súper doloroso y sin embargo es un espectáculo muy alegre, muy positivo. Surge de la necesidad de agradecer a estos artistas tan grandes y a estas pesonas tan especiales todo lo que nos han dado. Humildemente, tratamos cada uno de mostrar su voz con la libertad que ellos mismos nos han provocado tener. Poder compartir algo que nos gusta tanto, estar totalmente de acuerdo con las cosas que decían y recordar sus consejos, poder revivir esos momentos juntos, es un regalazo. Por eso no es un espectáculo pretencioso, para bailar lo mejor que tú tengas, es algo mucho más profundo, con total agradecimiento y respeto. Se crea un clima muy bonito. Desde el principio le decía a José Serrano, «merece la pena por supuesto durante el espectáculo, pero también al final, cuando recordamos todo lo que nos han legado». Transmitimos a la gente joven que no ha podido conocer a estos maestros la pasión con la que queremos a estos artistas. Realmente hay un antes y después de estos artistas.

-¿Fue la muerte de Paco de Lucía el detonante de este espectáculo?

-Seguimos huérfanos, ha dejado un vacío tremendo. A veces parece que el maestro va a volver a tocar, no lo tengo asumido. Cuando Paco se fue, a los dos días estrenábamos 'La Pepa' en Londres y fue para mí una de las funciones más difíciles de mi vida. De ahí surgió esto, pensamos que debíamos recordarlos. Y eso que todavía hay cosas de Paco que no escucho. Mi corazón todavía no puede escucharlas.

-¿Cómo definiría 'Voces' con pocas palabras?

-Es un espectáculo de hoy pero con un formato tradicional. Es un espectáculo tipo concierto con un pequeño hilo argumental que va haciéndonos cambiar de color, de palo y formas que son sus voces. Se baila por seguiriyas, por farruca, por soleá, por tientos, tarantas, algún romance de El Puerto... Tiene el formato tradicional pero nuestra voz es una voz de hoy. No hemos querido ser modernos ni antiguos, hemos querido ser lo que somos, expresarnos tal y como nos sentimos ahora mismo y pienso que sentimos así por la influencia de todos estos grandes. Por eso yo personalmente incluyo a Carmen Amaya, que no la conocí, pero sí tengo muchos detalles de ella en mi forma de bailar.

-Va de mito en mito, aunque sean muy diferentes entre sí...

-Yo antes pensaba que cualquier excusa era buena para bailar. Sin embargo, ahora no siento que sea una excusa, sino que es mi voz, mi forma de expresarme. Es muy bonito sentir que tienes la conexión con estos artistas o personajes, sus detalles, que a lo mejor no ha captado todo el mundo. Hay una diferencia con antes que supongo que serán los años, el ser mamá y todas esas cosas que influyen para que te expreses de otra manera. El baile no se trata sólo de bailar bien, sino de decir algo.

-¿Es consciente de esos cambios, de su deseo de innovar, de que nada se parezca a lo anterior?

-Me encanta que me haga esa pregunta. Creo que uno crece arriesgando, respeto a la persona que se queda en lo que le funciona, pero no crece. Yo siempre digo que nuestra compañía es privada, que se mantiene del público y que si ves desde el primer espectáculo hasta el último, observas el recorrido, que todo es diferente, en definitiva, que hemos crecido. Al principio, era tipo concierto, luego dramaturgia, después cogimos a Lorca, hicimos Carmen, la canción lírica... Con todo una va aprendiendo y añadiendo cosas a su identidad. Eso me da mucha vida. 'La Pepa' ha sido uno de los espectáculos más bonitos para hacer porque Cádiz representa las ganas de vivir, una alegría que te contagiaba. Eso es maravilloso. 'Medusa' para hacerlo es increíble, pero tremendamente triste. En estos tres años ha habido mucha diferencia, es verdad, cuando me pongo ahí delante y hago de mí misma me doy cuenta de que estoy llena de sensaciones y que tengo mucho que contar. Puedes equivocarte, por supuesto, pero también disfrutar muchísimo. Y quienes somos unos enamorados del flamenco nos encanta ese riesgo, el vernos, entre comillas, vendidos. Sin tener que ponerte la peluca o un traje. Ahora te expresas con tu verdad, guste o no.

-¿Es 'La Pepa' el espectáculo que más alegrías le ha dado?

-Supuso la vuelta a los escenarios, es algo en lo que creo y me siento muy orgullosa de que Cádiz sea la cuna de la libertad. Lo que había que transmitir era eso, que nos encanta nuestra tierra, las ganas de vivir que tiene nuestra gente y, sobre todo, 200 años después aquellos tiempos y aquellas gentes son un ejemplo. Es muy especial este espectáculo, ha marcado muchísimo mi vida. Pero no puedo mentir, a mí me encanta' Juan la loca, 'Carmen', 'Sabores'. A cada espectáculo lo tengo relacionado con algo importante en mi vida.

-Hace unos días declaró lo que otros artistas también dicen en muchas ocasiones. Que aquí no se cree el potencial del flamenco. ¿No estaba superado?

-Vaya por delante que yo siento sobre todo el agradecimiento del público, aunque sea muy pesada siempre lo repito. Es verdad que la cultura en crisis sufre. Es ahí donde te das cuenta de que el flamenco está muy considerado en países donde la cultura es uno de los principales puntales. Es un orgullo y pienso que es gracias a Paco, a Camarón, a Gades, que nos han abierto las puertas del mundo. Se nos olvida a veces que es un arte nuestro. Si a lo mejor otro país lo tuviera... No es cuestión del público, sino que el país en general, su cultura, lo cuide con la importancia que se supone un arte grande tiene. Vuelvo a repetir que no tiene nada que ver con el público, al que adoro. Llevo 18 años de compañía sin parar gracias al público. Soy una de las afortunadas que pueden soñar y hacer soñar y una de las que marco creo una de las partes positivas de nuestra cultura.

-¿Es por ello que quiso hacer el preestreno en El Puerto?

-La sede de la compañía la tenemos en Madrid y nos vinimos al sur cuando quisimos ser padres. Era un sueño después de estar 20 años fuera volver a Cádiz. Fue un regalo. El montaje de 'Voces' sucedió muy rápido y por eso los ensayos y el preestreno en el Muñoz Seca. A mí me hace mucha ilusión crear y montar en el sur porque yo empecé aquí. Me da una energía muy bonita.

-¿Qué espera de estas cuatro noches en el Falla?

-Espero que estos días sean mágicos, que podamos disfrutarlos muchísimo, que podamos bailar, cantar y tocar con la misma ilusión que llevamos. La responsabilidad te pesa por los años, pero la ilusión es la misma que al principio. Lo que dicen de las mariposillas en el estómago cuando hablamos del Falla es totalmente verdad. Ojalá podamos expresarnos y compartir con toda nuestra alma de una manera preciosa. Estos maestros se lo merecen y el público de Cádiz también. Si el Falla ya es mágico... pues intentaremos que lo sea aún más.

'VOCES', de Sara Baras, se representa jueves, viernes y sábado a las 21 horas. El domingo a las 20 horas. Localidades a partir de 20 euros. Gran Teatro Falla. Cádiz.