Puede que alguna vez te haya asaltado la duda al ir a estrenar alguna prenda que acabas de comprar. No la he lavado: ¿debería hacerlo antes de ponérmela por primera vez? La respuesta unánime de dermatólogos, asociaciones de consumo y médicos en general es rotunda: hay que lavar la ropa nueva antes de estrenarla.
La razón es prácticamente invisible, pero de suficiente peso como para pensárnoslo dos veces antes de usar directamente la ropa que no sabemos quién se ha probado o por dónde ha pasado antes de llegar a nuestras manos.
Por un lado, debemos pensar la cantidad de personas que manipula cada prenda solo en la cadena de fabricación, envasado y transporte. Después, ya en la tienda, los dependientes manipulan la ropa en su día a día, lo que, en suma, puede permitir hacernos una idea de la cantidad de bacterias que pueden llegar a acumular los tejidos. Suciedad invisible que estaremos poniendo en contacto con nuestro cuerpo ya solo al probarnos las prendas en la propia tienda. Por otro lado, tenemos que contar con las personas que se han probado la misma prenda antes que nosotros o, incluso, la han devuelto una vez comprada y parcialmente usada.
Estudios serios han demostrado que los gérmenes pueden vivir meses en la ropa y contagiar enfermedades como la gastroenteritis de un usuario a otro, tan solo con utilizar el probador. Estos estudios encontraron todo tipo de residuos en las prendas que analizaron, desde secreciones corporales, a restos menstruales o fecales.
Por otra parte, otro factor a tener en cuenta a la hora de decidir lavar la ropa nueva antes de ponérnosla es la presencia de químicos. Estos pueden tener origen, desde en los pesticidas que se utilizan en los campos, hasta los químicos que se necesitan para ña fabricación de algunos tejidos, pasando por los fungicidas que se utilizan a la hora del almacenamiento. Todos estos químicos presentes en las prendas nuevas pueden causar reacciones alérgicas en nuestra piel, algunas imperceptibles, que pueden evitarse con un lavado previo de la prenda.
En el caso de la ropa de bebé el riesgo de alergias y reacciones a los químicos es mucho mayor, con lo que lavar la ropa nueva será una obligación para prevenir problemas
Recomendaciones
Por un lado, para evitar poner en contacto nuestra piel con los restos que se van acumulando en las prendas de las tiendas, así con como los posibles productos químicos que estas acumulen, es recomendable que nos probemos la ropa con prendas puestas como mallas y camisetas interiores que nos permitan hacernos una idea con la talla, pero evitando el contacto directo con el tejido.
Lo ideal es lavar la prenda normalmente en la lavadora antes de estrenarla, siguiendo siempre las indicaciones de su etiqueta. Si quieres ponerte la ropa cuanto antes, pero no tienes ropa suficiente para llenar una lavadora, te recomendamos que realices un lavado a mano con detergente. Introduce la prenda en un barreño de agua y vierte un poco de detergente. Mueve la prenda para que se impregne bien el producto por cada rincón de la misma y deja que repose unos 15 minutos. Después, aclara y enjuaga bien bajo el grifo para que no queden restos de jabón. Por último, escurre la prenda cuidadosamente y tiéndela para que se seque.
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